Las dos piezas de metal procedentes de las Torres gemelas que viajaron a Marte.
Todos, a no ser que uno haya vivido hasta hace poco en un retiro absoluto en una cueva perdida del Tibet, sabe lo que ocurrió el 11 de Septiembre de 2001, una fecha que sin duda marcó un antes y un después en la historia reciente de nuestra civilización...en estos 10 años se han escrito mucho sobre ese día y posiblemente conocemos mil detalles, anécdotas y hechos que envolvieron ese suceso dramático. Sin embargo siempre quedan curiosidades que muchos desconocen, y que a pesar de su simbolismo no recibieron quizás la atención que se merecían. Y una de ellas tiene relación directa con la exploración espacial, y más concretamente con Spirit y Opportunity.
Este lazo entre el atentado de las Torres gemelas y ambos vehículos se inicia justo después de los atentados...y a poco más de un Kilómetro de distancia, exactamente en las instalaciones de Honeybee Robotics, en Manhattan, y donde esos días se estaban construyendo las herramientas de abrasión que permitirían a ambos rovers taladrar las rocas y estudiar su interior. Sobra decir el impacto que supuso para todos los empleados lo que sucedió a tan poca distancia, especialmente su fundador y presidente, Stephen Gorevan, que se encontraba a pocas calles en ese momento:
"Como la mayoría, lo que vuelve a mí incluso hoy en día es el sonido de los motores antes de que el primer avión golpeara la torre. Justo antes de estrellarse contra ella, pude oír los motores revolucionados como si aquellos detrás de los controles querían asegurar la máxima destrucción. Me detuve y miré durante unos minutos, dandome cuenta de me sentía totalmente indefenso, abandoné la escena y me fui a mi oficina, donde mis colegas me dijeron que un segundo avión se había estrellado. Vimos el resto de los tristes acontecimientos de ese día desde la azotea de nuestras instalaciones".
Stephen Gorevan,además de dirigir esta empresa, también es miembro del equipo científico detrás de las MERS, y por ello, posiblemente se decidió realizar un pequeño homenaje a las víctimas (dado el ajustado calendario para terminar, probar y entregar ambos instrumentos, la actividad en Honeybee Robotics no pudo detenerse ni en esos trágicos días) haciendo que algo de los desaparecidos edificios viajara hasta el planeta rojo
Ese algo era Aluminio, extraido de los restos de las Torres gemelas, un aluminio que se utilizó para fabricar las dos pantallas metálicas que protegen los herramientas de abrasión que se encuentran en los brazos de ambos rovers...unas placas que están decoradas con una bién visible bandera de los EEUU, como puede verse en algunas de las fotografías que aun recibimos de Opportunity. Lejos de ser un "capricho" patrótico tan típco de los estadounidenses, está puesta ahí como homenaje a las más de 2000 personas que murieron ese día.
Esta es la historia de dos pequeñas placas de metal, dos pedazos de una tragedia que terminaron formando parte de una de los mayores éxitos de la carrera espacial.
La placa con la bandera, en este caso del rover Spirit.
Opportunity se encuentra actualmente estudiando Chester Lake, proyectando su brazo robótico para estudiarla más de cerca...y con el la bandera que simboliza los atentados de las Torres Gemelas.
La tragedía de las Torres gemelas, a pocos cientos de metros de las instalaciones de Honeybee Robotics, impulsó a sus miembros a la realización de este pequeño pero cargado de significado homenaje...
Tributes to Terrorism Victims are on Mars
Remembering
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