Es actualmente el mejor recurso para estudiar otro mundo del Sistema Solar en caso de disponer de una sonda interplanetaria que lo visite, algo que desgraciadamente es lo habitual. Y especialmente doloroso cuando hablamos de la gran luna de Neptuno, Tritón, un mundo tan complejo como Plutón, con una atmósfera con fuertes vientos, volcanes activos y casquetes polares. Se le considera un planeta enano que fue capturado por el gigante azul, algo delatado por su órbita, que se mueve en sentido opuesto al resto de lunas del Sistema Solar. Y también es la clave de su destino, ya que con el tiempo se acercará tanto a Neptuno que terminará destrozado por sus fuerzas gravitatorias. Las mismas que explican que actualmente sea tan geológicamente activo. En resumen, un lugar fascinante.
El pasado 5 de Octubre de 2017 ese gran recuso se pudo aplicar a Tritón, y con el apoyo del observatorio GAIA, que permitió ajustar con mayor precisión la posición estelar, tuvo lugar una amplia campaña de observación desde nuestro planeta por parte de diversos equipos de astrónomos. Ya lo habíamos visto recientemente con la serie de ocultaciones estelares protagonizada por MU69, pero en este caso existía un extra: No solo se quería observar la ocultación de la estrella, sino también captar el llamado "destello central".
Con ese nombre se conoce una rápida ráfaga luminosa que aparece justo en el momento de oscuridad plena, y que es fruto de la refracción de la luz de la estrella por las capas más profundas de su atmósfera, a unos 10 Kilómetros por encima de la superficie. Algo muy valioso, ya que contiene información sobre ella y la posible presencia de nieblas. Valiosa y esquiva, ya que solo sería visible desde la Tierra en una franja de unos 100 km de anchura. De ahí que fuera tan necesaria la ayuda de GAIA, capaz de ofrecer datos muy precisos sobre la posición de la estrella elegida. Y ciertamente necesaria, ya que gracias a sus datos se pudo precisar donde se podría capar el destello central, que era 300 kilómetros más al sur de lo que se había predicho anteriormente.
Como resultado de todo ello tenemos ahora la espectacular imagen de este fenómeno, en que la estrella de va desvaneciendo a medida que Tritón se situada por delante ella, pero que justo cuando el eclipse alcanza su momento culminante reaparece de forma tan fugaz como intensa, aunque en realidad es la atmósfera de la luna la que provoca el fenómeno, hermoso y fugaz, lleno de belleza, pero también de información.
A la caza de un destello estelar con la ayuda de Gaia
2 comentarios:
Grandísima entrada Tokaidin.
Pudiste verlo desde Badalona? ;)
Gran trabajo, gracias. Te leo a menudo.
ESAs_sondas
Si, apretando los ojos así - -, como con mucha intensidad.
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