Mientras la NASA sigue luchando por sacar a delante una ambiciosa misión a Júpiter, y específicamente a la luna Europa, tan prometedora a nivel biológico, al otro lado del Atlántico, la ESA está poniendo la directa para su proyecto de exploración interplanetaria más ambiciosa de su historia, ExoMars a un lado, y que tiene también en el gigante joviano y sus lunas su meta final, aunque en su caso con Ganímedes como objetivo principal. Un mundo por derecho propio, mayor que Mercurio, la única luna con su propio campo magnético y también, aunque se conoce menor, con un basto océano de agua subterráneo.
Conocida como JUICE (JUpiter Icy Moons Explorer) y construida por Airbus Defence and Space, deberá lanzarse en 2022 y entrar en órbita joviana en 2029-30, iniciando así una intensa campaña de exploración que finalmente la llevará a entrar en órbita alrededor de Ganímedes, la primera vez que una sonda lo hace no ya alrededor de un planeta, sino de una luna. Los preparativos avanzan con rapidez, y ahora, una nueva representación simulada muestra el que parece ser ya su diseño definitivo. Un buen momento, por tanto, para conocerla en profundidad.
Su rasgo más destacado serán los paneles solares en forma de cruz, con una superficie total de 97 metros cuadrados. los mayores con los que jamás se haya equipó a una sonda interplanetaria. El motivo de tal tamaño resulta evidente teniendo en cuenta lo lejos que se encontrará del Sol una vez se sitúe en órbita joviana y que debe generar al menos 850 vatios de energía para mantener activo todos instrumentos y sistemas vitales. La mejora en la tecnología solar permite ahora utilizarla incluso en órbita joviana, pero con el requisito indispensable de tener una gran superficie en relación al tamaño de la propia sonda. Poco más se puede pedir teniendo en cuenta la luz solar disponible.
Todo ello para alimentar su completa carga científica, que investigarán la turbulenta atmósfera y la vasta magnetosfera jovianas, así como a Ganímedes, además de Europa y Calisto, a los que sobrevolará en diversas ocasiones antes de entrar en órbita alrededor de esa primera. Sus cámaras de capturarán con todo detalle las características de estas lunas e identificarán el hielo y los minerales en sus superficies, mientras otros sondearán el subsuelo y el interior para conocer mejor la ubicación y la naturaleza de sus océanos subterráneos. También se explorará la tenue atmósfera que rodea las lunas.
Además de sus espectaculares paneles solares, JUICE tendrá también una serie de "brazos", como un mástil de 10 m de longitud que alojará un magnetómetro, una antena de radar de 16 m y otras antenas que medirán campos eléctricos y magnéticos. Todos ellos serán especialmente útiles en Ganimedes, ya que al contar con su propio campo magnético serán básicos para poder estudiar su comportamiento, origen interno (lo que podría ofrecer información sobre su interior) y interacción con la propia magnetosfera de Júpiter.
Tiempo habrá, a medida que JUICE tome forma física y la podamos ver como algo tangible, para conocer con más detalle la sonda con la cual el viejo continente quiere dar el salto hacia el reino que se extiende más allá de nuestro pequeño rincón del Sistema Solar, y explorar por primera vez el mayor de sus planetas gigantes.
Explorando Júpiter
1 comentario:
Buena entrada. Sigo el blog a diario, muchas gracias por el contenido que nos prestas.
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