Detectados una decena de agujeros negros que habitan el centro de la Vía Láctea.
El corazón de nuestra galaxia es un lugar ciertamente caótico y lleno de sorpresas. Lo habita un agujero negro de 4 millones de veces el tamaño del Sol llamado Sagittarius A*, alrededor del cual se mueven un gran número de estrellas así como un enorme halo de gas y polvo. Suficiente este último, a decir de no pocos astrónomos, para ser el lugar perfecto para el nacimiento de gigantescas estrellas, colosos que vivirían rápido y morirían igualmente rápido en forma de supernova y generar, al menos entre las mayores de ellas, nuevos agujeros negros. Diminutos en comparación al monstruo que habita el mismo centro, y que este atraería hacia si. El escenario planteado es que deberían existir varias decenas de miles de ellos, como una nube de oscuras sombras acompañando a la oscuridad completa. Y ahora, finalmente, tenemos las primeras evidencias de ello.
Una de las formas para detectar este tipo de cuerpos celestes es mediante los estallidos de energía, especialmente en rayos x, que se producen cuando "devoran" materia, incluso una estrella vecina, es especial cual forman un sistema binario. El gas y polvo, acelerado a velocidades relativistas, se calienta en extremo y en cuando emite gran cantidad de energía en las partes más altas del espectro. Pero en este caso no había dado resultados. El centro galáctico está a unos 26,000 años luz de la Tierra, y "los binarios con agujero negro solo muy raramente emiten ráfagas de rayos X suficientemente grandes para ver fácilmente a una distancia tan grande, tal vez una vez cada 100 o incluso 1.000 años", explica Chuck Hailey, que lideró el equipo que sacó a la luz este descubrimiento.
Por ello Hailey y su gente buscó las emisiones más estables y menos energéticas emitidas por los discos de acreción cuando los binarios son relativamente inactivos. Utilizando datos de archivo del Observatorio de rayos X Chandra, detectaron una docena emisiones de rayos X, indentificados como sistemas binarios, todas ella a menos de 3,26 años luz del núcleo galáctico. Extrapolando estos datos al escenario imaginado en esa turbulenta región, estimaron que podrían existir 300-500 sistemas binarios de esta clase, y más de 10.000 agujeros negros más solitarios e inactivos.
Un hallazgo que puede hacer "avanzar significativamente la investigación de ondas gravitacionales porque conocer el número de agujeros negros en el centro de una galaxia típica puede ayudar a predecir mejor cuántos eventos de onda gravitacional pueden estar asociados con ellos", explica Hailey."Toda la información que necesitan los astrofísicos está en el centro de la galaxia".Sin embargo, los investigadores advirtieron que hacer estimaciones con respecto al número real es complicado por el hecho de que es probable que haya otras potenciales fuentes de rayos X, como los pulsares. Será trabajo de futuros observatorios en esta banda del espectro ser capaces de distinguirlas con claridad, sacando a la luz las pequeñas sombras que se esconden en la oscurdidad.
Una
vista de Sagittarius A *, el agujero negro supermasivo en el centro de
la Vía Láctea, tomada con el Observatorio Chandra (círculo en verde). El agujero negro es visible como una mancha brillante porque está emitiendo algunas de sus destellos de rayos X ocasionales. A su alrededor hay otras fuentes causadas por sistemas binarios con agujeros negros más pequeños, señaladas en azul.
Vast Black Hole Swarm May Surround Milky Way's Heart
2 comentarios:
Increíble. Y pensar que el "fin" del universo como lo conocemos será cuando estos monstruos se acaben evaporando por la radiación de hawking que emiten... Es así, no? Sino que alguien me corrija
Si, es una de las posibilidades que se manejan.
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