miércoles, noviembre 12, 2014

Philae: El día que tocamos nuestros orígenes

La pequeña sonda europea hace historia al aterrizar en la superficie del cometa Churyumov-Gerasimenko.

Se les considera como los fósiles del Sistema Solar, los restos de su turbulenta formación que aún conservan en buena parte, especialmente para los recién llegados desde las profundidades de la Nube de Oort, su estado original, tal como eran cuando el Sol empezó a brillar y los planetas se estaban formando al "devorar" el material del disco protoplanetario. Por ello podemos decir que hoy, 12 de Noviembre de 2014, a las 17:03:30 UTC, hemos tocado en cierta forma el material que un día, en un pasado extremadamente lejano, permitió nuestra existencia. Hoy es el día en que la Humanidad aterrizó en un cometa.

Tal y como estaba previsto la pequeña sonda Philae se separó de Rosetta, con la que viajó más de una década, e inció su largo descenso hacia Churyumov-Gerasimenko, sin impulsor alguno y confiando en que la trayectoria prevista la llevara hacia la zona escogida para ese gran momento. Unas 7 horas más tarde se posaba sobre lo que parece una zona relativamente blanda, no sin problemas: Los arpones, que debían fijarla definitivamente sobre ella e impedir que rebotara de nuevo hacia el espacio (ya que la gravedad es extremadamente baja) no funcionaron, por lo que su destino final quedó en manos de los tornillos situados en sus patas, que afortunadamente si cumplieron su cometido. 

Después de unos tensos minutos de espera, en que la irregular señal de Philae indicaba movimiento, y como mínimo un rebote en la superficie antes de aterrizar de forma definitiva, parece que se encuentra ya fija y tomando datos e imágenes. Las próximas horas y días serán testigos de una frenética actividad, tanto por parte de los ingenieros, intentando saber lo ocurrido con los arpones y activarlos si se considera necesario, como por parte de los científicos, ante un río de información que ya está empezando a llegar a pesar de todo.

Más allá de estos problemas, el simple hecho de aterrizar suavemente en un cometa representa un logro impresionante, digno de estar marcado para siempre en letras de Oro en los libros de historia. Y seguramente son solo las primeras páginas de lo que está por venir, con Rosetta estudiando su actividad creciente, y Philae, esperamos, haciendo lo mismo desde la superficie. Hoy hemos tocado un pasado remoto, casi primigenio, y con ello también nuestro propio pasado. Hoy es realmente un gran día.

Philae alejándose de Rosetta, fotografiada por esta última.

Rosetta fotografiada por Philae. Más de 10 años de vida en común terminó con ambas observándose una a la otra en la distancia.

La superfice del cometa vista por Philae, en ese momento a 3 kilómetros de altura.

Fotografía segundos antes del aterrizaje, con un terreno que parece bastante suave y polvoriento, cosa que se confirmó poco después.

A la espera de una confirmación, la que podría ser la primera imagen ya en la superficie.

Las imágenes del descendo permiten marcar el lugar exacto del aterrizaje.

Los fallidos arpones de Philae, quizás victimas de tantos años en el espacio.

En un lugar del firmamento Philae y Rosetta están haciendo historia.

ESA

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entre lo logrado por la Philae,la donda Dawn camino Ceres y la New Horizons menudos meses mas emocionantes nos esperan...

DDB dijo...

En un día como hoy, Tokaidin, gracias por cuidarnos y mantenernos informados. ¡¡Hurra por Europa!!