La familia planetaria se mueve alrededor del Sol en un mismo plano orbital, como si esta formara un decorativo anillo alrededor de la estrella...todo siguen esta "norma", siendo los cuerpos que no la cumplen aquellos cuya trayectoria fue alterada posteriormente a su formacion.
Los Cometas son los mayores "rebeldes"..tanto los que vemos en el cielo nocturno como aquellos que permanecen en la llamada Nube de Oort y que se cree que originalmente se formaron en la region ocupada por Urano y Neptuno, para ser proyectados posteriormente hacia los limites de los dominios del Sol extendiendose en forma de nube esferica. De ahi provienen los nuevos cometas que van sustituyendo a los que terminan "apagandose", gastados por diversos encuentros cercanos con el astro rey, motivo por el cual aun seguimos viendolos brillar a pesar de los 4500 millones de años pasados. Tambien por ello el angulo de sus orbitas cuando se acercan a nosotros es completamente aleatoria, dado que pueden llegar desde cualquier punto de Oort, de la que se terminan desprendiendo por la acumulacion de pequeñas perturbacions gravitatorias originadas por las estrellas vecinas ( Ya que se cree que llega a extenderse hasta casi 1.5 años-luz del Sol )
Asi pues, excepto ellos, la familia planetaria orbitan alrededor del Sol en un mismo plano ( con minimas variaciones ). El motivo se encuentra en el propio origen del Sistema Solar ( y de cualquier otro )...al colapsarse una gran nube de gas y polvo la conservacion del momento angular la hace girar sobre si misma mas y mas rapido. Esto crea una fuerza centrifuga que la "aplana" en el eje de rotacion y la extiende en el "ecuador", por lo que todos los cuerpos que nacen a partir de ella, evidentemente, siguen el mismo camino. Los propios planetas presentan un "achatamiento" a consecuencia de su propio giro...Saturno es un buen ejemplo, con un diametro ecuatorial un 10% mayor que el polar.
La fotografia superior muestra la nube de particulas de polvo que inunda el sistema solar extendiendose por todo el plano de la eliptica, brillando tenuemente y haciendo visible asi este camino que todos, incluidos nosotros mismos, seguimos. Venus resplandece sobre esta llamada luz zodiacal como un coche desplazandose sobre una autopista, una comparacion no muy alejada de la realidad.
Y de fondo otro camino pero a escala aun mayor, el que marca la Via Lactea, el disco de estrellas que conforma la Galaxia y cuya formacion como tal no dista de los procesos que siguio nuestro sistema planetario. Un cruce de caminos en el firmamento, las dos rutas por la que la pequeña Tierra transita, aparentemente divergentes pero en realidad comunes.
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