Aún se encuentra muy por detrás de los programa espaciales Estadounidense y ruso, pero avanza a gran velocidad, de forma decidida y siguiendo lo que parece un plan a medio y largo plazo bien definido, sin desviarse ni aparentemente dudar en su decisión de convertirse en una potencia espacial...una realidad que hoy es mucho más evidente con el lanzamiento de Tiangong-1.
A las 13:16 GMT de ayer despegaba, desde la base de lanzamiento de satélites de Jiuquan, un cohete Long March 2F, transportando en su interior este módulo de 10.4 x 3.3 metros...minutos después este se encontraba ya moviendose alrededor de la Tierra, con lo que China oficialmente se convertía en el tercer pais, tras EEUU y la URSS, en lanzar su propio módulo orbital.
Considerado el último paso antes de afrontar la construcción de una estación orbital propia, el módulo Tiangong-1 (Palacio Celestial) tiene un claro objetivo: Ofrecer la experiencia necesaria a los técnicos chinos, en especial en la aproximación y acoplamiento a una estructura de esta clase, tanto por parte de vehículos automáticos como tripulados...por ello, en los dos años de duración de este experimiento a gran escala, hasta tres naves chinas viajarán hasta el "Palacio Celestial", dos de ellas automáticas (Shenzhou 8 y Shenzhou 9) y una tercera (Shenzhou 10) que transportaría a la futura tripulación, incluida posiblemente la primera mujer astronauta (o taikonauta) china de la historia. La primera de las naves se lanzará muy pronto, quizás el próximo Noviembre, mientras que las otras dos viajarán al espacio a lo largo de 2012.
Una vez alcanzados todos estos objetivos se pondrá fin a la misión de la Tiangong-1, que será dirigido hacia la atmósfera terrestre para su desintegración, dejando un enorme tesoro de experiencia y datos técnicos que serán la base del siguiente gran paso en la carrera espacial China: La construcción de su primera estación espacial, un complejo de tres módulos y 60 Toneladas con claras semejanzas con la MIR soviética.
Con ella el gigante asiático estará más cerca de los logros de Estados Unidos y Rusia, aunque aún le quedará mucho para alcanzarlos, pués no deja de ser un pais que justo ahora esta emergiendo como una potencia global... pero la velocidad con la que esta cumpliendo etapas, la bonanza económica en la que vive y lo que parecen ideas claras a medio y largo plazo (ambas cosas ahora mismo ausentes en las potencias occidentales) hace que ahora mismo no parezca tan lejano el día en que China se coloque a su mismo nivel...¿Realidad o ficción? Como siempre el tiempo dictará sentencia. De momento, pero, el primer Palacio Celestial es ya una realidad.
Una réplica de Tiangong-1 en la Academia China de Tecnología Espacial
Aproximación, maniobra de acoplamiento, entrada de tripulantes en su interior...Tiangong-1 es basicamente un gran experimieto que permitirá a los Chinos adquirir experiencia en lo que se refiere a la construcción y habitabilidad de una estructura orbital.
Presente y futuro de la carrera espacial China.
Trás la Tiangong-1 llegará la primera estación orbital china propiamente dicha, formada de tres grandes módulos y un puerto de atraque para las naves ShenZhou.
No hay nada tan emocionante, al menos para todos aquellos interesados en la exploración espacial, como el momento en que una nueva sonda parte hacia su destino, algo solo superado por el momento en que esta lo alcanza, sea orbitándolo o aterrizando en el, y nos envía las primeras imágenes de mundo lejanos. Es el principio de una nueva aventura, pero al mismo tiempo la parte final de un largo camino.
Uno que comienza muchos años antes del lanzamiento, como una simple idea que va creciendo, tomando forma, mientras recorre una auténtica carrera de obstáculos técnicos y presupuestarios, cualquiera de los cuales puede convertir a la futura sonda facilmente en un simple proyecto descartado, olvidada para siempre en un cajón al igual que muchas otras. Por ello no es hasta que abandona el mundo virtual y empieza a tomar forma en el mundo real que todos aquellos implicados en su realización pueden respirar más tranquilos. No es que eso haga que su realización este completamente asegurada (solo hay que ver los problemas con el telescopio James Webb) pero si que el camino para que ocurra es ya mucho más claro y despejado.
Una transcendental frontera entre lo virtual y lo real que la sonda MAVEN cruzó recientemente...aunque solo sea, de momento, en forma de la estructura primera (lo que podríamos considerar su esqueleto),que vemos en la fotografía superior siendo inspeccionada por los técnicos de Lockheed Martin, la empresa encargada de su construcción.
Con unas dimensiones de 2.3 x 2.3 x 2 Metros de altura y formado por diferentes capas de aluminio y grafito, este cubo ligero (apenas 125 Kilogramos) pero tremendamente resistente (deberá soportar presiones de hasta 6G durante el lanzamiento) será la base sobre la cual se asentará el resto de la sonda, mientras que el interior del cilindro central que vemos en la imágen albergará el depósito de combustible, 1640 Kilogramos de Hidrazina para los diversos impulsores de MAVEN, encargados no solo de mantener la sonda en una posición estable una vez en el espacio (sin una serie de pequeños encendidos de los estabilizadores cada cierto tiempo una sonda espacial terminaría por girar sobre si misma fuera de control, significando el final de la misión) sino de permitir la inserción orbital, frenándola lo suficiente como para que la gravedad marciana pueda atraparla.
MAVEN, cuyo lanzamiento esta previsto para el 18 de Noviembre de 2013 y su llegada a Marte para el 22 de Septiembre de 2014, tiene como objetivo central el estudio en profundidad las capas altas de la tenue atmósfera, con el objetivo de comprender mejor que ocurrió con la mucho más densa cobertura gaseoso que todos los indicios apuntan que tuvo hace varios miles de millones de años.
Por ello entrará en una órbita elíptica que la llevará, en los momentos de máxima aproximación, hasta solo 150 Kilómetros de distancia de la superficie, lo que le permitirá tomar mediciones extremadamente precisas, incluida hasta 5 "inmersiones" en la atmósfera para tomar muestras directas de ella.
Sin duda deberá afrontar una dura prueba, pero no mucho más dura que el largo camino lleno de obstáculos que ha tenido que superar hasta ahora para alcanzar el mundo real.
MAVEN, viajando hacia los límites de la atmósfera marciana.
Volando sobre la superficie...MAVEN se moverá muy cerca de ella, tanto que llegará a tomar muestras directas de las capas más altas de la atmósfera.
¿Porque la atmósfera marciana es tan delgada? Se cree que la pérdida de su campo magnético, fruto de que su pequeño tamaño le impidió retener el suficiente calor como para que su núcleo actuara como una dinamo, como ocurre en La Tierra, hizo que el viento solar, lenta pero de forma imparable, fuera erosionándola hasta su estado actual.
Se cumplían 1661 Soles (días marcianos) desde su llegada al planeta rojo, y superando todos las expectativas de supervivencia había alcanzado el que con casi total seguridad sería su mayor y último objetivo, el cráter Victoria. Enorme en comparación a todo lo visto con anterioridad, sus 750 metros de diámetro ofrecían no solo imágenes espectaculares sino también el acceso a estratos subterráneos que de otra manera habrían sido inaccesibles, lo suficientemente interesantes como para que el ya veterano explorador entrara en su interior, una aventura que se prolongó durante casi un año (11 Septiembre de 2007 a 28 de Agosto de 2008) y que se llevó a cabo a pesar del riesgo evidente de que no lograra volver al exterior.
Fueron en total dos años de permanencia en la zona , dos años de duro trabajo que debía marcar el brillante final de la misión, pues no existía ningún otro objetivo interesante en las proximidades. Solo en la lejanía podía apreciarse, y a duras penas, los bordes de un gigantesco cráter llamado Endeavour, cuyos más de 20 Kilómetros de diámetro dejaban los 750 metros de Victoria casi en ridículo. Que maravilloso sueño sería llegar hasta el, pensaron muchos...
La imágen superior, tomada exactamente hace tres años, durante el ya mencionado Sol 1661, encontró a Opportunity en pleno "viaje turístico" alrededor de Victoria, y momentáneamente parado cerca del pequeño Sputnik. Una panorámica espectacular de ambos cráteres, adornado por un horizonte aparentemente liso. O Casi, porque allí, en la distancia, se apreciaba ese sueño imposible. 21 Kilómetros lo separaban de el, una distancia abrumadora, mayor que toda la recorrido hasta ese momento por un vehículo que ya llevaba 4 años activo en la hostil superficie marciana. Pensar en cruzar semejante inmensidad podía considerarse ciertamente una idea absurda.
1000 Soles después, tres años en tiempo terrestre, Opportunity se encuentra en el interior de Endeavour...antiguas fotografías como esta permiten apreciar mejor lo extraordinario de su viaje, del sueño imposible que durante tanto tiempo pareció ser mientras lo mirábamos desde la distancia.
Los lejanos puntos convertidos en Solo por tener imágenes como estas los tres años de viaje valieron la pena....
...pero Opportunity está ahí para conseguir mucho más que eso, y actualmente estudia el afloramiento rocoso Salisbury, donde tras realizar un orificio con en RAT ( Rock Abrasion Tool) se dispone a iniciar su análisis. A moment to think…
Aquarius completa su primer mapa global de la salinidad de los Oceanos.
Es posiblemente uno de elementos más extrodinarios de la naturaleza...es el única roca mineral comestible, siendo su consumo, directo o indirecto, imprescindible para las formas de vida complejas, incluido, claro está, el Ser Humano, para el cual la Sal fue durante mucho tiempo casi (o quizás sin el casi) tan valiosa como el más preciado de los metales, y su comercio y venta fuente de prosperidad económica pero también de numerosas luchas. Un recuerdo de todo ello es la palabra española salario, del latín salarium, y que se refería al hecho de que a un trabjador se le daba parte de su remuneración en forma de sal para que pudiera conservar los alimentos.
Pero si para nosotros, especialmente en tiempos antiguos, la Sal o Cloruro de Sodio es importante, aún lo más para nuestro planeta como pieza clave de su compleja maquinaria climática...y más concretamente para los Océanos, el auténtico pilar central de todo el movimiento de nuestra atmósfera, así como el reflejo de los cambios que en ella se producen.
Y es que una mayor o menor salinidad, con las diferencias de densidad que ello implica entre diversas masas de agua, es el motor que impulsa las corrientes oceánicas, y dicha salinidad está, a su vez, asociada con el clima que existe en cada zona, menor cuanto más agua dulce recibe, sea de lluvias, rios o deshielos. Por eso conocer dichas diferencias no solo ayudaría a la mejor comprensión del clima, sino también al seguimiento de los cambios que en el se están produciendo, dado que una alteración del régimen de lluvias o un fuerte deshielo se reflejaría en una alteración del patrón salino oceánico...lo que a su vez afectaría las corrientes marinas y con ello al clima. Un auténtico "pez que se muerde la cola" planetario.
Por ese motivo se lanzó el satélite Aquarius, y cuyos resultados no se están haciendo esperar: El primer mapa global de la salinidad oceánica global, uno aún muy preliminar creado a partir de los datos reunido durante las dos primeras dos semanas y media, obtenidos como parte del proceso de calibración de los instrumentos cientíticos, y por tanto aun sujeto a algunos errores e incertidumbres, pero aún así notable en su precisión y un magnífico anticipo de lo que esta por llegar los próximos meses.
En el puede observarse la gran diferencia entre el Atlántico, con grandes zonas en los trópicos con mucha más concentración de sal (tonos amarillos y rojos), con respecto al Pacífico, donde resalta especialmente la poca salinidad tanto en la franja ecuatorial, que esta asociada con la abundancia de lluvias, como en la parte Norte, mientras que el sur es ligeramente más salino. En el Indico, por su parte, se aprecia la abrupta diferencia entre la zona al oeste de La India, extremadamente salda, con la situada al este, donde la influencia del Ganges y los Monzones provocan una situación completamente opuesta. Un detalle igualmente notable es el efecto del Amazonas en forma de una lengua de azul intenso.
A pesar de que es un mapa aún muy prematuro que presenta diversos fallos (La baja salinidad de las aguas costeras son errores de medición debido a la proximidad a las costas o bordes de hielo, el océano austral presenta aún fuertes incertidumbres y las "rayas" norte-sur visibles a lo largo de la imagen son producto de pequeños errores de calibración), representa el primer paso de una misión que deberá ofrecernos en los próximos meses el mejor mapa global de la sainidad oceánica jamás levantado...y es un primer paso, pese a todo, espectacular, pués supera con mucho las espectativas del equipo científico de Aquarius para una fase tan temprana.
Aquarius, buscando entender las salinas llaves del clima terrestre.
Una visión extremadamente simplificada de como funciona el movimiento oceánico debido a la diferencia de salinidad y temperatura: En los mares tropicales la fuerte evaporación genera masas de agua muy saladas, que se hunden al ser más densas....al igual que ocurre en las zonas polares, especialmente en la Antártida, pues al congelarse el agua se desprende de toda su sal (motivo por el cual el hielo siempre es de agua dulce y flota) y se precipita hacia el fondo en forma de una corriente densa y fría. Por el contrario, en el Pacífico, las aguas se "dulcifican" y se vuelven más ligeras, ascendiendo lentamente a la superficie. Todos esto genera lo que se llama la gran corriente oceánica o Termohalina, que recorre todos los océanos y es una pieza central del clima terrestre.
Esquema de la gran corriente global o Termohalina, el auténtico sistema circulatorio de nuestro planeta.
Han formando parte de la historia de la Humanidad practicamente desde sus orígenes...unas antiguas, otras más modernas, cambiando de nombre, algunas desapareciendo para siempre, otras surgiendo para ocupar su lugar...no dejan de ser proyecciones humanas, fruto de la tendencia de nuestra mente a buscar formas reconocibles en todo lo que nos rodea, pero no por ello dejan de ser hermosas, ademas de tener una indiscutible utilidad como puntos de referencia, tanto en La Tierra como en el cielo.
Aunque posiblemente los humanos ya imaginaron figuras celestes desde practicamente sus orígenes como especie racional, las primeras referencias a las contelaciones se encuentran ya en las primeras civilizaciones, desde Mesopotamia hasta China, pasando por La India o el Imperio Inca, todas ellas creadas con fines claramente prácticos: Agrícolas (para medir el tiempo y las estaciones) de viaje (servían de orientación a navegantes y mercaderes) y religiosos.
Como creaciones humanas que son, cada pueblo proyecto en los cielos figuras propias y dividió la bóveda celeste según su forma de ver la realidad...muchas contelaciones han aparecido y desaparecido junto con sus respectivas culturas, quizás más de las que podemos ni tan solo imaginar, aunque otras han sobrevivido hasta formar parte de la familia de las 88 contelaciones actualmente aceptadas de forma global. Asi, podemos encontrar referencias de Leo, Taurus y Escorpio en las primeras culturas mesopotámicas datadas en el 4000 A.C., posteriormente adoptadas por los Griegos, y con ellos, a la cultura occidental. Igualmente Orión ya se menciona en la Odisea de Homero (Siglo IX A.C.), y mil años antes en Egipto, bajo el nombre de Sahu.
Una de las herencias más notables de la antiguedad fue lo que los griegos denominaron Zodíaco, surgido en Babilonia durante el reinado de Nabucodonosor II (Siglo VI a.C), que los Helenos también adoptaron y nos transmitieron con sus actuales nombres y formas...
Dado que se trata de la franja por donde el Sol, la Luna y los planetas siguen su camino por la bóveda celeste es natural que practicamente todas las civilizaciones del mundo hicieran referencia a ella, aunque de formas y significados muy diferentes...así, por ejemplo, los chinos la dividían en 28 mansiones ( 二十八宿 èrshíbā xiù) y los Indues en 27 snakshatra o mansiónes lunares, en ambos casos basándose en el movimiento de la Luna, no del Sol, como ocurre en Occidente.
La "organización" actual del firmamento, tal y como vemos en cualquier libro de astronomía, es relativamente reciente, pués fue establecido en 1928 por la Unión Astronómica Internacional, quien delimitó oficialmente la esfera celeste en las 88 constelaciones actuales, marcando unos límites claros dentro de los cuales cualquier estrella se consideraba parte de ella, indistintamente que no participara en la figura como tal. Con ello muchas pequeñas constelaciones hasta ese momento reconocidas, desaparecieron para siempre del firmamento, pero ayudó a simplificarlo y mejorar su función orientativa.
De esas casi la mitad son una herencia Griega, que a su vez tomaron algunas de ellas de civilizaciones más antiguas, mientras que el resto son modernas, en muchos casos creadas por los europeos cuando se adentraron en el Hemisferio Sur, como por ejemplo Hydrus, hidra,Indus, Pavo real, Triangulum Australe o Tucana, ademas de las curiosas Microscopium (Miscroscopio),Telescopium (Telescopio), Carina (Quilla), Puppis (Popa), Vela (Vela) o Pyxis (Brújula), estas cuatro últimas un claro reflejo de su época.
Compañeras de la Humanidad desde el mismo momento que levantamos nuestros ojos, proyecciones de nuestra mente y fruto del deseo inconsciente de ver formas familiares y, por ello, tranquilizadoras, las constelaciones han ido evolucionando junto a ella, reflejando con sus cambios el fluir de la historia y el paso de las diferentes civilizaciones cuyas huellas permanecen en nuestro firmamento.
Dos ejemplos de constelaciones desaparecidas....por un lado Emú en el cielo, de la mitología aborigen brasileña y que abarcaba desde Escorpio hasta la Cruz del Sur, por el otro Honores Frederici, un ejemplo de constelación creada con el propósito de honrar a un rey, en este caso Federico II de Prusia, en una época en que nombrar constelaciones en honor al monarca y lograr el apoyo de su monarquía se convirtió casI en un juego habitual en las cortes europeas.
La visión China del Boveda celeste. La ilusión de las constelaciones, estrellas aparentemente cercanas pero que en realidad se encuentran a distancias de la Tierra muy diferentes entre si.
Ilusiones en la distancia...y en el tiempo. Dado que cada estrella tiene un movimiento propio, la actual configuración es temporal y destinada a cambiar con el paso de las eras.
El planeta con la mayor temperatura superficial del Sistema Solar.
Cuanto más lejos del Sol más frio es un mundo, y cuanto mas cerca, más caluroso..es una suposición lógica y acertada. Casi siempre. Y es que Venus representa la gran excepción a la regla, como podemos ver en este termómetro planetario, donde supera a Mercurio, a pesar de que este último se sitúa mucho más cerca del abrasador brillo de nuestra estrella.
Recubierto de una densa atmósfera de Dióxido de Carbono que apenas permite que una pequeña parte del calor total que recibe el planeta sea emitido de vuelta al espacio, la superficie se convierte en un auténtico horno, con temperaturas medias que rondan los 467 Cº y que apenas cambian sea de día o de noche, en el ecuador o en los Polos, pues dicha atmósfera es tan y tan densa que redistribuye el calor de forma casi homogénea...un proceso que lleva los termómetros a cotas que ni en Mercurio se alcanzan a pesar de su menor distancia la Sol.
Quizás uno de los aspectos más inquietantes de Venus es que los indicios nos llevan a pensar que en sus orígenes fue un mundo mucho más acogedor y parecido a La Tierra, e incluso a disponer de Océanos como los nuestros. Hasta que un efecto invernadero fuera de control lo arrastró hacia el abismo, fruto posiblemente del paulatino aumento del brillo solar que el clima venusiano, al estar más próximo al Sol, no pudo compensar.
La hoy abrasada superficie de Venus es todo un recordatorio de lo frágil que resulta un medio ambiente adecuado para la vida, fruto de un equilibrio que puede romperse por numerosas causas.
Una mirada al lugar más caliente del Sistema Solar (con la excepción, claro está, del propio Sol) de la mano de las sondas Venera soviéticas.
La mortal atmósfera de Venus, responsable de su clima extremo, también lo es de que sea tan brillante en nuestro cielo nocturno al reflejar una gran parte de la luz solar que recibe.
Llegó el Otoño en el Hemisferio Norte y la Primavera en el Hemisferio Sur (exactamente a las 9:05 UTC del pasado día 23) , producto, como sabemos, de la inclinación del eje de rotación de La Tierra con respecto al Sol y los cambios que ello implica en el numero de horas de luz diurna y el ángulo con que esta llega hasta el observador.
Pero esta vez, en lugar de explicar como funcionan y porqué existen las estaciones, lo podemos ver con nuestros propios ojos gracias al espléndido trabajo realizado por el satélite Meteosat-9, cuyas imágenes permitien ahora generar un video que, cubriendo un año entero, muestra como el día y la noche, la luz y la oscuridad, avanzan y retroceden en cada uno de los hemisferios, una fluctuación que tiene su reflejo en el clima en forma de lo que tradicionalmente llamamos las cuatro estaciones.
Podemos apreciar que, a pesar de que, logicamente, las zonas diurnas y nocturnas ocupan lo mismo sobre la esfera terrestre, la inclinación del planeta hace que un hemisferio tenga muchas más horas de luz que no de oscuridad (Primavera, Verano) durante una época y justo lo contrario (Otoño, Invierno) en otra. Este es el motor de un ciclo que consideramos normal pero que no deja de ser un fenómeno fruto de una circunstancia concreta.
Esta prespectiva única es posible gracias a que el Meteosat-9 sigue una órbita geoestacionaria, dando una vuelta completa alrededor del planeta exactamente en el mismo tiempo que tarda este en dar una rotación sobre si mismo, lo que implica que siempre se encuentra sobre el mismo punto de La Tierra (y desde esta el satélite parece estático en el cielo) y puede, por ello, regalarnos este magnífico video del baile de las estaciones.
La combinación entre la inclinación del planeta y su posición orbital es la que determina el paso de una estación a otra.
Como una hormiga perdida en la inmensidad, moviendose lentamente hacia el interior de Cape York y con las huellas dejadas trás de si como claro testimonio de su movimiento...así se muestra Opportunity a los ojos de la Mars Reconaissance Orbiter, que nos permite observar a este valiente explorador desde la órbita marciana. No es ni mucho menos la primera vez que podemos verlo de esta manera (ni a su hermano Spirit) pero no por ello resulta menos interesante y curioso poder ver a quien nos esta ofreciendo imágenes tan espectaculares desde esta prespectiva distante...
Mientras, ajeno al hecho de estar siendo "espiado" desde el cielo, Opportunity continua su tarea científica, incesante desde su llegada a Endeavour...tomando espectaculares panorámica, estudiando objetivos interesentes y dejando su huella para la eternidad en el afloramiento rocoso llamado Salisbury, donde el RAT (Rock Abrasion Tool) realizó una pequeña perforación para permitir a los instrumentos científicos analizar su interior y desvelar su composición.
Una tarea, esta última, que requiere ahora días y días, en lugar de unas pocas horas como en sus inicios, por el agotamiento del Cobalto-57 que utiliza el espectrómetro Mössbauer para realizar las mediciones...pero viendo las imágenes enviadas, los resultados obtenidos y los años que lleva en Marte rompiendo todas las previsiones de superviencia, este maravilloso veterano tiene todo el derecho de tomarse las cosas con calma.
Panórámicas en color...puede observarse la elevación en el centro de Endeavour, fruto del "rebote" del terreno trás el impacto y trazos de manterial más claro que parece haber sido desplazado por el viento. A pesar de su espectacularidad Opportunity no lo visitará, pues no hay rastros de minerales que puedan resultar de interés en la búsqueda de señales de agua.
Trabajos de perforación en Salisbury. Esta señal, al igual que otras parecidas dejadas tanto por Opportunity como Spirit, seguirán ahí cuando la Humanidad ponga el pie en la superficie de Marte.
El RAT en movimiento.
Bicotasing (en primer término) y Halliday, al fondo a la derecha, dos de las últimas rocas observadas por Opportunity...ambas parecen un conglomerado de material, un tipo de formación que parece bastante habitual en Endeavour.
Día sidéreo, solar y civil, parecido pero no igual.
¿Cuantas horas tiene un día? La respuesta, claro está, son 24 horas, siendo el punto medio, las 12:00 o mediodía, el momento en que el Sol se situa en el punto más alto del firmamento desde el punto de vista del observador, mientras que las 00:00 marcan justo lo opuesto y se conoce como medianoche. ¿Y a qué se debe la duración del día? La respuesta, nuevamente, parece facil: Es lo que tarda La Tierra en dar una vuelta sobre si misma. Y sería correcta...pero no del todo.
Y es que la rotación de nuestro planeta es de 23 horas y 56 minutos, es decir, hay 4 minutos de más entre la duración del día y la rotación del planeta...¿quizás se trata de un simple redondeo para hacer más manejable la división horaria? No, pues en ese caso y en apenas unas semanas el desfase empezaría ha ser un problema serio. La respuesta está en el movimiento de La Tierra alrededor del Sol.
Existen en realidad dos días diferentes, por un lado el llamado día Sidéreo y que corresponde a la rotación del planeta, es decir las ya mencionadas 23 Horas y 56 Minutos, y por otro el Día Solar, que abarca el tiempo medio entre dos mediodías sucesivos y cuya duración es de 24 Horas y 4 minutos...y entre uno y otro se situa el Día civil, que es el que usamos para medir el paso del tiempo y que corresponde a las ya conocidas 24 horas, no dejando de ser un punto medio hecho un poco a nuestra medida y comodidad.
¿Porque esta diferencia entre el día Sidereo y el Solar? En principio ambos deberían ser idénticos, pero aquí es donde el movimiento orbital alrededor del Sol (a razón de unos 30 Kilómetros/Segundo) marca las diferencias...y es que cada vez que nuestro planeta completa una vuelta sobre si mismo (Sidereo) se ha desplazado con respecto a la posición que ocupaba al principio del día anterior. El resultado es que para abarcar un día solar se necesita una nueva rotación completa de nuestro planeta...y unos minutos más, ya que el Sol, con respecto al fondo de estrellas que sirve de referencia, ya no está en el mismo sitio, sino ligeramente desplazado, y hace falta este tiempo extra para alcanzar la misma posición del día anterior desde el punto de vista del observador.
Esta diferencia cambia a lo largo del año, ya que la velocidad con la que viajamos cambia segun estemos en el Perihelio (más rápidos) o en el Afelio (más lentos), y con ello el desfase entre un día y otro, aunque el día Civil es siempre de 24 Horas, y que corresponde más o menos con media de todo el año entre Sidereo y Solar. Una cifra convenientemente redonda que ayuda a la administración de nuestro tiempo...
Una imagen vale más que mil palabras...el movimiento alrededor del Sol hace que el día solar sea ligeramente más largo de lo que correspondería si tomáramos como referencia unicamente la rotación de la Tierra.
No existe mejor profesión que el de astronauta...es dura, exigente, peligrosa, requiere un duro entrenamiento y pueden pasar años entre un vuelo y otro...pero cuando finalmente lo hacen y miran hacia La Tierra todo eso queda atrás y todos los sacrificios parecen justificados. Porqué posiblemente pocas pueden rivalizar con lo que significa el poder mirar nuestro pequeño mundo desde el exterior, admirar esa perla azul que es nuestro hogar desde más allá de las nubes..
El video superior, creado por el profesor James Drake a partir de 600 fotografías, ejemplifica todo lo que representa alcanzar ese viejo sueño de ser astronauta que tantos y tantos tenemos de pequeños y al que solo unos pocos elegidos llegan...volamos sobre la cara nocturna del planeta y por un momento nos sintamos, aunque sea de forma muy limitada, como uno de ellos.
El viaje de la ISS empieza sobre el Pacífico, cerca de la costa Norteamericana, moviendose hacia el Sur..sobrevolamos la isla de Vancouver y Victoria, su ciudad princial, para seguidamente curzar Vancouver, Seattle, Portland, San Francisco, Los Angeles, Phoenix, numerosas ciudades de Texas, Nuevo México, México, Ciudad de México, Golfo de México, la península del Yucatán, El Salvador, Guatemala, Panamá, Columbia, Ecuador, Peru, Chile, el lago Titicaca y el Amazonas, para finalmente entrar en el lado diurno cerca ya de la Antártida.
Durante la travesía podemos observar numerosos relámpagos procedentes de formaciones tormentosas, la Ionosfera (la linia amarillenta sobre el horizonte), un satélite (0:55) y diversas estrellas.
El brillo y color están exagerados para resaltar mejor los detalles, pero eso no le quita ni un ápice de belleza...sin duda ser astronauta es un trabajo duro, que exige mucha preparación y donde el riesgo de un viaje sin retorno siempre esta presente. Pero la recompensa es maravillosa.
Auroras vistas desde la ISS...una visión única de este fenómeno celeste reservada a aquellos que viajan más allá de nuestro mundo.
Una profesión dura y peligrosa, pero que merece la pena solo por momentos como este.
Posiblemente es una de las imágenes mas tranquilizadora que existe...verlas ahí, parpadeando como luciérnagas en la oscuridad, siempre nos transmite una curiosa sensación de paz, al menos los que hayan tenido la oportunidad de ver un cielo estrellado en todo su esplendor, algo cada vez dificil con la contaminación lumínica bajo la que vivimos mucho de nosotros.
Un firmamento que parece lleno de vida...hasta que salimos de la atmósfera. Y es que muchos se sentirían decepcionados al mirar la bóveda celeste desde una hipotética nave espacial, porque de golpe el cielo amable y vibrante que tantas veces obsevaron desde su casa se habría convertido en algo muy diferente...veríamos más estrellas, pero este tapiz estelar se nos antojaría estático, muerto, carente de la vitalidad de esas noches en La Tierra. Habríamos dejado atrás el espejismo.
Y es que el parpadeo de las estrellas, aquel que dota de tanta vida al cielo nocturno, no es más que eso, un simple espejismo, una ilusión producto de las turbulencias de nuestra atmósfera, el constante movimiento de masas de aire a diferente temperatura y opacidad, olas que se propagan por ella incluso en los días que aparentemente todo está en calma...y que, con ello, alteran, difuminan y desvian la luz que nos llega de ellas, ya extremadamente tenue dada la distancia (El sistema Centaury, el más próximas, se encuentran a 40 Billones de kilómetros de la Tierra), produciendo el caracteristico parpadeo que tan familiar nos resulta pero que tiene, como vemos, un origen mucho más próximo.
Y no solo parpadean, sinó que, si las observamos bién, parecen proyectar destellos de todos los colores, algo que nuevamente es producto de nuestra atmósfera: Cada longuitud de onda, correspondiente cada una a un color en concreto, se ve afectada de forma distinta cuando cruza por ella , y asi, mientras unos colores llegan hasta nosotros, otros son dispersados (como ocurre con el azul, responsable de que nuestro cielo tenga ese color)...que según el momento pueden ser unas u otras, ya que las turbulencias atmosféricas cambian rapidamente las condiciones reinantes de temperatura y densidad.
¿Y los planetas? ¿Porque en su caso no ocurre lo mismo? La respuesta es que si ocurre, aunque en mucha menor medida, hasta practicamente no ser detectable por nuestro ojos, al encontrarse mucho más cerca y su disco ocupar una fracción mayor de la bóveda celeste, mientras que las estrellas son practicamente un punto sin dimensiones apreciables. Y lo mismo vale para El Sol, una estrella como las demas.
Para la astronomía, pero, este fenómeno ha sido siempre un auténtico problema, pues las distorsiones de la atmósfera dificultan el trabajo de observación al disminuir la calidad de las imágenes tomadas. Es precisamente esto lo que impulsó la construccion de telescopios espaciales como el Hubble (y, por tanto, libre de cualquier interferencia), que los terrestres se instalen siempre en lugares altos y secos, y que se hayan desarrollo tecnologías (como la óptica adaptativa) para permir a estos anular dichas interferencias. Y en este último caso con resultados espectaculares.
Así que cada vez que nos preguntemos porqué todo ese esfuerzo técnico y económico en construir observatorios en lugares tan elevados, o incluso ponerlos en órbita, solo tenemos que salir una noche clara y observar el cielo estrellado. En su parpadeo está la respuesta.
Venus ocultado por La Luna, en una observación que permite apreciar las turbulencias de nuestra atmósfera...en el caso de los planetas esta apenas es perceptible, a no ser que, como en este caso, los observemos con un telescopio. Con las estrellas, mucho más lejanas y que son practicamente un punto sin dimensiones, este efecto es bien visible.
La distorsión atmosférica a todas las fuentes de luz que nos llegan, pero en el caso de los planetas, mucho más cercanos y cuyo disco ocupa una fracción de la bóveda celeste, este efecto no es perceptible por nuestros ojos, motivo por el cual aparecen en el firmamento cono estrellas fijas, sin cambios, mientras que en las estrellas este efecto es claramente visible en forma del familiar parpadeo que todos conocemos.
El efecto es mayor cuanto más bajo se encuentre el estrella en el horizonte, pues la cantidad de atmósfera que su luz debe atravesar antes de alcanzarnos es mayor.
La Bóveda celeste más allá de la atmósfera se nos mostraría llena de estrellas pero carente de los parpadeos y cambios de color que vemos en las noches terrestres...
La sonda Dawn sigue enviándonos imágenes espectaculares de este pequeño mundo
Una montaña de 15 Kilómetros de altura que se eleva desde el gran crater del Polo Sur, y que, proporcionalmente al diámetro del asteroide, que ronda los 530 Kilómetros, es una de las más alta del Sistema Solar...por debajo, y quizás fruto del propio impacto, la extraña serie de formaciones liniales que, como un cinturón, rodean el ecuador. Dos de los numeroso detalles que convierten a Vesta en un lugar extraodinario.
A lo largo de estas ultimas semanas, y mientras sigue descendiendo (a unos 790 km a finales del pasado 15 de Septimbre), Dawn continua acumulando más y más fotografías, con las cuales se podrá generar un mapa topográfico del Vesta, un paso importantísmo para poder estudiarlo en profundidad, pués conocer exactamente su forma es vital para poder medir con mayor precisión las diversas formaciones geológicas de la superficie.
Dawn se dirige hacia la llamada órbita LAMO (Low Altitude Mapping Orbit), que una vez alcanzada le situará a unos 465 Kilómetros por encima de la superficie, desde donde continuará su estudio de este gran asteroide...o pequeño planeta, según se quiera considerar. Las mejores imágenes aún están por llegar.
Viajando por Vesta...explorando un nuevo mundo.
Viajando alrededor de Vesta, mediante imágenes tomadas el 24 de Julio de 2011...puede obsevarse las linias que rodean por completo al asteroide como si fueran un cinturón, así como la diferencia de brillo entre un hemisferio y otro.
Su irregular silueta se recorta contra el oscuro espacio.
Cráteres, fracturas, montañas, valles, zonas claras y oscura..el complejo rostro de Vesta.
Derrumbamientos en una de las paredes del gran crater del Polo Sur.
Un curioso filamento oscuro recorre la superficie en esta imagen...¿cual es su origen?
Grandes crateres junto a altas colinas y crestas.
Crateres en distintas etapas de erosión, desde los que apenas queda rastro hasta los que su clara silueta delata su juventud.
Dos crateres de apariencia mucho más joven que el terreno circundante.
Una visión del Polo Sur de Vesta, construida a partir de diversas tomas individuales...
Una visión global de esta mundo, donde las diferencias entre cada una de las zonas resulta evidente.
Los tres tipos de órbita que afrontara Dawn durante su estancia. Actualmente se está moviendo hacia la más cercana al asteroide de todas, LAMO.