Chandrayaan-2 envía las primeras imágenes después de su entrada en órbita.
La aventura ya ha comenzado. Lentamente y mediante una serie de maniobras de frenado, la segunda misión a La Luna del gigante asiático está ajustando su órbita, con la meta puesta en lograr una circular que le lleve a sobrevolar de forma periódica los polos y sus reservas de agua helada, y más concretamente el polo sur, donde su módulo de aterrizaje intentará añadir el nombre de su país a la selecta lista de naciones que lo han logrado. Un colosal salto adelante con respecto a su predecesora, y con la cual se pondrá, de tener éxito, al mismo nivel que China, su gran rival regional. Al menos de momento.
Aún quedan días para el momento histórico del alunizaje, y del posterior despliegue del rover que transporte del módulo. Cuando llegue el momento acapararán la total atención de los medios, cosa comprensible. Pero nunca se debe olvidar que la parte principal de esta misión, y la que esperemos permanecerá algunos años en activo trabajando sin descanso en reunir, entre otras cosas, nuevas evidencias de la presencia de agua en los polos lunares, es la sonda Chandrayaan-2. Y para recordarlo nos envía ahora las primeras imágenes tomadas después de su llegada, y más concretamente del lado oculto, ahora ya no tanto gracias a esta nueva ola de exploradores.
Aunque tomadas desde una distancia notable, muy superior a la que estará una vez situada en su posición definitiva, su claridad y definición nos promete un futuro brillante para este segundo asalto indio a La Luna, así como para reafirmar una evidencia, y que son naciones relativamente nuevas en el escenario espacial, y no las antiguas potencias, lo que lo están liderando. Mucho tendrá que esforzarse la NASA para recuperar el terreno perdido, si es que lo recupera en algún momento. Por ahora nuestra compañera de viaje es el terreno de juego de nuevos invitados, China, India y, en menor medida, Japón. Y eso es una gran noticia.
Los cráteres Jackson, Mach, Mitra y Korolev, todos ellos en la cara oculta, donde los "mares", tan características de la cara visible, están casi ausentes.
Sommerfeld es un gran cráter de impacto ubicado en las latitudes más lejanas del norte de la Luna (169 Km). Tiene un interior relativamente plano rodeado por un anillo de montañas y varios cráteres más pequeños. Lleva el nombre del Dr. Arnold Sommerfeld, un físico alemán pionero en el campo de la física atómica y cuántica. Al noreste de este cráter se encuentra Kirkwood que lleva el nombre del astrónomo estadounidense Daniel Kirkwood, de aproximadamente 68 km de diámetro.
Región del polo norte lunar. Muestra cráteres de impacto como Plaskett (109 km), Rozhdestvenskiy (177 km) y Hermite (104 km), uno de los más fríos manchas en el sistema solar.
Images of Lunar Surface captured by Terrain Mapping Camera -2 (TMC-2) of Chandrayaan 2
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