El principio de año (terrestre) le trajo novedades inesperadas, fruto del mismo dificultoso camino que está afrontando para llegar al conocido como Valle Willamette, ahora mismo su objetivo a más corto plazo. El viaje en el que está embarcado actualmente, como lo fueron prácticamente todos los anteriores, tiene establecido que, independientemente de su meta final, cuando se encuentro con algo puede resulta interesante, el rover se detendrá para examinarlo. No deja de ser una decisión lógica, aunque esto implica alargar el tiempo necesario para alcanzar la meta auténtica. Especialmente cuando aparecen literalmente bajo tus pies.
Los últimos días de Diciembre, Opportunity se encontró un terreno difícil y empinado. Cuando trató de avanzar en pendientes de 20 grados, las ruedas comenzaron a remover el suelo, que era poco consistente, y el avance programado para esa jornada se redujo en gran medida. Nada para lo cual este rover no esté preparado, y al detectar esta situación, detuvo su avance antes de tiempo, quedando a la espera de nuevas instrucciones. El 22 de diciembre de 2016 se le hizo retroceder lo suficiente para que se colocara en un terreno más sólido y seguro. La siguiente medida era observar el terreno problemático para saber lo ocurrido.
Sin embargo eso debería esperar hasta 2017, ya que Mars Odyssey entró a finales de año en Modo Seguro, por lo que Opportunity no pudo establecer contacto con ella para enviar la información reunida y recibir nuevos comandos desde la Tierra. Los últimos días de 2016 permaneció a la espera, y no fue hasta el 2 de Enero, una vez recuperada esa primera, cuando reinició las actividades, avanzando hasta la zona problemática para saber que había provocado tal situación. La que se encontró no pudo ser mejor, ya que en su desplazamiento fallido había desplazado material superficial, sacando a la luz otro hasta ahora escondido, mucho más brillante. No hace falta remarcar que dedicará un tiempo a su estudio antes de seguir adelante.
Un buen comienzo de año para Opportunity, que en pocos días cumplirá nada menos que 13 años en activo, aún plenamente capacitada para hacer ciencia a pesar de sus inevitables problemas, fruto de tantos años soportando un ambiente tan hostil, y que avanza hacia una nueva meta tanto o más interesante que todas las que ya lleva alcanzadas desde ese lejano Enero de 2004, cuando protagonizó un aterrizaje notablemente afortunado. Fue el principio de un viaje que hoy día continúa, y como podemos ver, aún lleno de sorpresas.
Una vista más cercana del terreno brillante, quizás sales, desenterradas por las ruedas del, cuyas huellas podemos ver a la derecha.
Opportunity Updates
No hay comentarios:
Publicar un comentario