Fue una misión corta pero de resultados extraordinarios, lanzada el 14 de Diciembre de 2009 para realizar un escáner casi completo de la Bóveda Celeste en diversas frecuencias del espectro infrarrojo, en un amplio estudio del espacio profundo que llegó a su final en Octubre de 2010, cuando agotó el refrigerante necesario para mantener sus instrumentos más sensibles a la temperatura adecuada. Su vida se prolongaría un poco más, hasta el 17 de Febrero de 2011, con objetivos adaptados a sus capacidades ahora más limitadas, centrado ya en cuerpos de nuestro sistema solar, principalmente asteroides y cometas.
Finalmente, y dando por alcanzados todos sus objetivos, la NASA decidió poner punto final a la misión del pequeño telescopio orbital WISE (Wide-field Infrared Survey Explorer) y dejarlo en hibernación, con la capacidad de ser reactivado si en algún momento las circunstancias (y el presupuesto) hacían reconsiderar la decisión. Y esto último es precisamente lo que se anunció recientemente por parte de la Agencia Norteamericana: WISE será "despertado" este próximo Septiembre para afrontar una nueva misión de 3 años de duración y como objetivo de identificar nuevos miembros de los conocidos como NEOs (near-Earth objects), principalmente pequeños asteroides cuyas órbitas los llevan en algún momento a menos de 45 millones de Kilómetros de La Tierra.
Durante sus últimos meses en activo, y pese a tener ya sus reservas de refrigerante agotadas, siguió conservando la suficiente capacidad como para realizar una corta pero más que exitosa campaña de observación de posibles asteroides cercanos a nuestro planeta, muchos de ellos casi invisibles en luz visible pero detectables, gracias a la radiación solar que los calienta, en luz infrarroja, en lo que se llamó misión NEOWISE, por lo que básicamente estaríamos ante la continuación de esta primera, ahora extendida mucho más en el tiempo y cuyos objetivos, además de conocer mejor esta cercana y siempre potencialmente peligrosa familia planetaria, es colaborar en el conocido proyecto de la NASA para detectar, capturar y traer hasta la órbita lunar a un pequeño asteroide, siendo este quizás el motivo último de la recuperación de WISE.
Durante los pocos meses que duro la misión NEOWISE, además de observarse decenas de miles de objetos ya conocidos, se descubrieron 21 cometas, más de 34.000 asteroides en el cinturón principal entre Marte y Júpiter, y 135 NEOs, por lo que se esperan descubrimientos tan o más numerosos en este nueva etapa, siempre y cuando WISE sea capaz de despertar. Aunque no se esperan problemas en este aspecto, no hay que olvidar que estamos ante un ingenio espacial que lleva 2 años con sus sistemas inactivos, por lo que habrá que esperar varias semanas, cuando se inicien las operaciones para devolverlo a la vida, para asegurar que este pequeño pero poderoso observatorio infrarrojo está de regreso.
Un ejemplo de las capacidades de observación duante la misión NEOWISE: El pequeño asteroide 1998 KN3 es claramente visible como un punto verde, gracias a que la luz solar caliente su superficie, provocando que emita intensamente en el espectro infrarrojo.
NASA Spacecraft Reactivated to Hunt for Asteroids
1 comentario:
Es bueno aprovechar los ya invertido y darle uso hasta qué ya no sirva más ....
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