lunes, septiembre 30, 2013

Un día privado

Space X y Orbital Sciences completan un Domingo de éxito con sus respectivas misiones.

Un problema en el sistema de posicionamiento hizo suspender su llegada, prevista para el 23 de Septiembre, y la llegada de una nueva Soyuz obligó a esperar un poco más hasta que llegara la luz verde por parte de la NASA. Y esta llegó el mismo día que, desde la superficie, otro vehículo volaba por primera vez hacia la órbita terrestre. En una de esas curiosidades del destino Cygnus y Falcon 9 v1.1, representantes cada uno de ellos de compañías que buscan su lugar en este nuevo campo de juego que es la órbita terrestre y más allá, coincidieron en el tiempo, apenas separadas por unas pocas horas.

Cygnus fue la primera en esta doble serie de éxitos, cuando a las 11:00 GMT y sobre la vertical del océano Indico, el brazo robótico de la ISS la atrapó de forma sólida una vez la nave había completado adecuadamente todas las maniobras para colocarse en posición, lo que formaba parte al mismo tiempo de las "practicas" realizadas por el equipo de control para demostrar las capacidades de un vehículo que estaba protagonizando su primer viaje, en realidad un vuelo de prueba antes de iniciar sus viajes regulares.

A las 12:44 GMT Cygnus era definitivamente acoplada a la ISS, con lo que concluía esta primera aventura de un vehículo destinado a rivalizar, o quizás seria mejor decir complementar, a la Dragón de Space X en la nunca sencilla taréa de asegurar la vital línea de suministros entre La Tierra y la estación orbital. "Nuestros equipos de naves espaciales y vehículos de lanzamiento han afrontado una tremenda cantidad de trabajo en estos 5 años, y todos estamos muy orgullosos de sus logros", expresó David Thompson, presidente de Orbital Sciences.

Poco después, a las 16:00 GMT, desde la rampa de lanzamiento SLC-4E de la Base Aérea de Vandenberg, despegaba por primera vez el cohete Falcon 9 v1.1, el nuevo cohete de la compañía Space X capaz de poner en órbita baja hasta 13 Toneladas, en contraste con las 9 del Falcón 9, de que le separan, entre otras mejoras, la incorporación de nuevos motores Merlin 1D en configuración octogonal, una nueva y enorme cofia y mayores tanques de combustible. Un lanzamiento que se desarrolló sin problemas y siguiendo la trayectoria prevista, completando así la prueba necesaria y exigida por la NASA para iniciar sus vuelos regulares.

En su interior viajaban el pequeño satélite canadiense CASSIOPE, que tiene como objetivo el estudio de la magnetosfera terrestre así como poner a prueba el CASCADE CX, un prototipo del futuro sistema de transmisión orbital de datos desarrollado por este país, así como 6 minisatélites: POPACS (Polar Orbiting Passive Atmospheric Calibration Spheres), un CubeSat que se separa en 3 unidades una vez en órbita, DANDE (Drag and Atmospheric Neutral Density Explorer), y CUSat, que se separará en 2 subunidades.

Considerado oficialmente una versión mejorada del Falcón 9, este lanzamiento abre las puertas a la siguiente gran apuesta de Space X, el Falcón Heavy, ya que ambos elementos, tanto la rampa de lanzamiento SLC-4E de Vandenberg, adaptada para poder acoger tanto al v1.1 como al Heavy, como el propio cohete v1.1 son elementos esenciales para hacer realidad este lanzador pesado, que deberá ser capaz de poner hasta 21 Toneladas en órbita baja y 13 en geoestacionaria

En definitiva, un nuevo y gran éxito por parte de la compañía de Elon Musk, que de esta manera, aunque fruto de las circunstancias, tomó una parte del protagonismo que en principio debía acaparar Orbital Sciences, y convirtió este pasado 29 de Septiembre en una inesperada fiesta del sector privado, con ambas compañías alcanzando sus respectivos objetivos con pocas horas de diferencia.

La llegada de Cygnus a la ISS.

 
El lanzamiento de Falcon 9 v1.1 desde Vandenberg. 

Private Cygnus Spacecraft Makes Historic 1st Rendezvous with Space Station
  
Lanzamiento del primer cohete Falcon 9 v1.1 (CASSIOPE)

domingo, septiembre 29, 2013

Post Vintage (66): El último viaje de la flota del Kaiser

La curiosa procedencia del acero que se utilizó en los Apolo y diversas sondas interplanetarias

La historia de la carrera espacial está llena de hechos curiosos y que, en su mayor parte, resultan desconocidos para el gran público...incluso cuando, como es este caso, implica objetos tan grandes como un acorazado y momentos aparentemente tan desligados de ella como es la primera guerra mundial. Y es que la tecnología que nos lleva hacia las estrellas no deja de ser, en buena parte, el resultado de reunir y llevar un paso más allá una herencia cuyas raices se adentran en el pasado mucho más de lo que podamos imaginar. Y entre ellas algunas sorprendentes que se remontan al final de la 1ª guerra mundial.

Noviembre de 1918. Alemania, militarmente acorralada en el exterior, ahogada economicamente y al borde de la revolución interna, finalmente se rinde a las potencias aliadas y se firma el armisticio. La Flota imperial germana, que tantos problemas había causado a la británica y que llegó a disputarle la hegemonía de los océanos, queda bajo control de Gran Bretaña y es confinada en el fondeadero de la Royal Navy en Scapa Flow, al norte de Escocia, a la espera de decidir su destino.

Y este se decide rápido y de forma inesperada, ya que el almirante alemán, pensando que los británicos habían decidido finalmente apropiarse de su flota (no dejaban de ser buques de guerra magníficamente construidos, que podían ser perfectamente intgrados en la Royal Navy), envía una señal codificada, acordada de antemano, y los alemanes hunden todos los barcos. Un último gesto de resistencia valiente pero en parte inutil, ya que Scape Flow es muy poco profundo y algunos de ellos, a lo largo de los años, terminaron siendo reflotados y puestos en servicio. Otros, pero, resultan irrecuperables y con el tiempo deberán ser eliminados, ya que no tienen ningún valor ni se puede sacar nada de ellos que merezca el esfuerzo. Hasta 1945.

El final de la 2ª Guerra Mundial y la aparición del armamento nuclear cambia por completo la situación y convierte los barcos que permanecen sumergidos en Scape Flow en algo valioso. Más exactamente el acero con el que están construidos.

Y es que necesita mucho aire para fabricarlo, un aire que desde 1945, con la primera detonación atómica y las que siguieron, esta ligeramente contaminado de radiación. Son niveles extremadamente pequeños, solo por encima del que sería su nivel natural, pero suficiente para afectar al acero que se fabrica desde entonces. No lo suficiente para tener un efecto real en su calidad ni para afectarnos (motivo por el cual se sigue fabricando), pero que lo hace inutil cuando se trata de construir instrumentos extremadamente sensibles, como es el caso de los monitores de radiación empleados en algunas naves espaciales.

De golpe los 3 buques de guerra y cuatro cruceros ligeros que aún permanecían en las aguas de Scapa Flow, construidos antes de anterior a 1945 adquirieron un valor inesperado, y su acero, con el tiempo, tomó un lugar en la carrera espacial...sondas como la Galileo y las Pioneer llevaron hacia otros mundos fragmentos de lo que un día fue la poderosa flota del Kaiser, y los Apolo dejarón en la superficie lunar instrumentos construidos con dicho acero. Poco podían imaginar las tripulaciones alemanas, cuando miraban La Luna brillar sobre las aguas del Atlántico en las oscuras noches oceánicas de la guerra, que un día sus barcos, aunque solo fueran en parte, encontrarían en ella su lugar de descanso definitivo.

El confinamiento y posterior auto-hundimiento de la flota alemana en Scape Flow.

Algunos sería reflotados con el tiempo, otros permanecen hoy día como una valiosa fuente de acero limpio.

Las numerosas pruebas nucleares al aire libre realizadas desde 1945 hasta hace relativamente poco tiempo han dejado su huella en el ambiente que nos rodea.

Seguramente nadie en la flota alemana pensaba que parte de ella llegaría tan lejos...literalmente hasta otros mundos y más allá.

Los barcos alemanes que llegaron a la Luna

sábado, septiembre 28, 2013

Destellos de una isla fugaz

El satélite de observación terrestre EO-1 ofrece imágenes desde la órbita de la pequeña isla surgida en las costas de Pakistán.

El pasado 24 de Septiembre un terremoto devastador de magnitud 7.7 asoló el Oeste de este país, casuando 350 muertos y dejando unas 100.000 personas sin hogar, un desastre en toda regla que tuvo, sin embargo, un efecto secundario inesperado con el surgimiento, delante de las costas de la región de Gwada, en las costas del Índico, de una nueva y pequeña isla. Un acontecimiento espectacular aunque no único, ya que se trata de un fenómeno observado después de grandes seísmos, con la diferencia de que en esta ocasión ocurrió en aguas poco profundas y delante de una costa relativamente poblada.

"La isla es en realidad una gran acumulación de barro del fondo marino que fue empujada hacia arriba", explica Bill Barnhart, geólogo del Servicio Geológico de EE.UU., que estudia los terremotos en Pakistán e Irán. "Esta zona del mundo parece ser testigo de muchas de estas formaciones, ya que la geología es la correcta para su formación. Necesitas una capa relativamente superficial de gas metano, dióxido de carbono, o algo más, y fluidos bajo presión. Cuando esa capa se altera por las ondas sísmicas (como un terremoto), los gases y fluidos se vuelven boyantes y se precipitan hacia la superficie, arrastrando roca y barro con ellos".

Y ciertamente este parece ser le caso, ya que en esta nueva isla."Hay un escape continuo del gas metano altamente inflamable a través de un número de orificios de ventilación". Las costas de Makran, donde se engloba Gwada, es un lugar de intensa actividad sísmica, ya que aquí es donde la placa tectónica Arábiga colisiona y se mete por debajo de la placa continental euroasiática, lo que explica que este tipo de formaciones geológicas, fruto de la acumulación, compresión y, bajo los efectos de potentes ondas sísmicas, ascenso de gas, barro y rocas hacia la superficie, aunque habitualmente no tan visibles como este caso.

En las imágenes obtenidas por el satélite de observación terrestre EO-1 (Earth Observing-1) los tonos más claros de verde y marrón en el agua revelan lecho marino poco profundo o sedimentos en suspensión. La profundidad del agua alrededor de la nueva isla es de aproximadamente 15 a 20 metros, según el geólogo marino Asif Inam del Instituto Nacional de Oceanografía de Pakistán. "El suelo en esa zona es generalmente plano, pero la pendiente de esta zona cambia de forma abrupta", dijo Inam. Laa imágenes son lo suficientemente claras para mostrar incluso las ondulaciones paralelas de las olas que se mueven hacia la orilla.

Aunque algunos puedan pensar que Pakistán acaba de ganar nuevos territorios, lo cierto es que la vida de esta pequeña isla posiblemente será corta, ya que con el tiempo el gas subterráneo se enfriará, comprimirá o escapará, haciendo que la superficie colapse y regrese de nuevo bajo las aguas. Igualmente las condiciones meteorológicas y mareas del Mar de Arabia también irán desgastándola con relativa rapidez. A escala geológica su tiempo, al igual que la de los humanos que la visiten, no será más que un destello fugaz y apenas perceptible en la larga historia de nuestro planeta.


Vista aerea de esta pequeña isla de apenas 600 metros de diámetro, y que permite apreciar mejor su naturaleza de barro y piedras.

Una visita directa permite apreciar las fuertes emanaciones de gas, el motor del surguimiento de esta isla.

Las placas tectonicas en las que está dividida la corteza terrestre, En la parte derecha, en amarillo, podemos ver la placa Arábica, cuyo movimiento y colisión con la Euroasiática es el origen de la intensa actividad de la región.

EO-1, parte del New Millennium Program de la NASA.

Earth Observatory

viernes, septiembre 27, 2013

Reescribiendo Marte

Gran cantidad de agua en el polvo marciano, un tipo de roca volcánica nunca vista antes y ausencia de señales de moléculas orgánicas, los descubrimientos más notables durante sus primeros 100 días en el planeta rojo.

Curiosity se encuentra de camino al punto de entrada a Aeolis Mons, la gran montaña de sedimentos que representa su meta defintiva, dejando atrás Yellowknife Bay, donde hizo su primera gran pausa para dedicarse por completo a su estudio científico y en la que encontró evidencias claras de que el ahora seco y frío Marte dispuso en el pasado de todos los elementos necesarios, agua incluida, para sostenar algún tipo de vida simple. El objetivo de la misión quedó cumplido y por delante solo queda encontrar nuevas evidencias e intentar acceder a estratos rocoso más antiguos y cercanos en el tiempo a esa época ya desaparecida.

El éxito en Yellowknife Bay, pero, nos hace olvidar que Curiosity comenzó su actividad exploradora mucho antes, en las pequeñas dunas de Rocknest, donde realizó el primer análisis en profundidad de muestras de suelo marciano, y en Jake Matijevic, una extraña roca que llamó rápidamente la atención de los científicos de la misión. Los primeros resultados fueron publicados en pocos días, pero el examen de los datos enviados por los diversos instrumentos del rover siguió adelante hasta extraer de ellos últimos vestigios de información, recordado nuevamente que una sonda o explorador robótico es en relidad el principio de una larga cadena, la fuente primigenia de la que surge un río de datos que son revisado, contrastados, replicados y vuelos a revisar por numerosos científicos, y que fluiendo incluso después de su final. De ahí que en más de una ocasión se hagan descubrimientos "a posteriori".

En total 100 días en Marte y cuyos descubimientos ahora conocemos ya al completo, en una serie de artículos ahora publicados, algunos de ellos con implicaciones claras para futuras misiones tripuladas.

1) Un húmedo mundo desértico: Una de los hallazgos más transcendentales en Rocknest es que la arena marciana, el material de fino grano que lo formaba, y que por extensión encontramos en todo Marte, está formado de un 2% de agua, algo que confirmaron tanto el análisis directo realizado por SAM como el láser de Chemin, que detectaó Hidrógeno en cada uno de los 139 "disparos" realizados sobre el.

En cífras prácticas eso significa que se podría obtener 1 litro de agua por cada 0.03 metros de suelo marciano, una magnífica noticia de cara al futuro, ya que cualquier misión tripulada que, quizás algún día, pusiera sus pies en el planeta rojo, podría, con el equipo adecuado, disponer de un suministro propio tanto de agua como de aire (Oxígeno) y combustible (Hidrógeno), sin tener que traerlo todo desde La Tierra

"Para mí, fue un gran momento Wow. Estaba muy feliz cuando vimos que hay agua fácilmente accesible en la tierra debajo de sus pies. Y es probablemente verdad donde quiera que vaya en Marte" explica Laurie Leshin, del Rensselaer Polytechnic Institute y lider de este estudio.

SAM también determinó el origen de esta agua, ya que su proporción de Deuterio (un isótopo pesado del Hidrógeno) es la misma que presenta la que encontramos en la tenue atmósfera marciana, lo que indica que la arena actú como una esponja, absorviendo y atrapando esta última.

2) Una piedra extraña: Jake Matijevic llamó rápidamente la atención de Curiosity y fue donde realizó el primer examen, en este caso con el APXS de brazo robótico. El resultado es que nos encontramos ante un tipo de roca volcánica nunca vista en Marte pero que son realtivamente comunes en la Tierra. "De todas las rocas marcianas, ésta es las más parecidas a la Tierra. Es algo increíble. Lo que esto indica es que el planeta es más evolucionado de lo que pensábamos, más diferenciado"

3) Sin señales de orgánicos y suelos tóxicos: Aunque oficilamente no se encontraron señales de moléculas con base de carbono, si que se detectaron trazas, en concreto Cloro, aunque no tenía nada que ver con la posible presencia pasada de vida. Ahora se considera que existía algún tipo de contaminación orgánica llegada desde La Tierra y que esta reaccionó con un producto químico tóxico presenta en Marte llamado Perclorato, que la Mars Phoenix ya había detectado en las zonas polares pero que ahora se demuestra presente también en el Ecuador.

"El perclorato no es bueno para la gente. Tenemos que averiguar, si los seres humanos van a entrar en contacto con el suelo marciano, la forma de lidiar con eso. Esa es la razón por la que enviamos exploradores robóticos antes de enviar misiones tripuladas, para tratar de entender realmente las oportunidades y las cosas buenas, así como los retos con los que tendremos que trabajar".

Una de las  paradojas de este elemento es que puede resultar negativo para nosotros pero podría ser prefectamente una fuente de energía óptima para una hipotética fauna bacteriana, por lo que es un hallazgo negativo pero al mismo tiempo aumenta las posibilidades de que pueda existir algún tipo de actividad biológica.

En definitiva, y en estos primeros 100 días, Curiosity demostró su extraodinaria capacidad científica, desvelando facetas de Marte desconocidas y que obligarán a cambiar algunas ideas previas sobre este planeta. Por delante le esperaba Yellowknife Bay, donde realizaría descubrimientos aún más trascendentales y del que posiblemente conoceremos más detalles en el futuro....y más allá los inumerables estratos de Aeolis Mons esperan su llegada.

Jake Matijevic, el primer objeto marciano examinado por Curiosity, tanto por su APXS (circulos) como por el láser de Chemin (puntos). El resultado es que nos encontramos casi con un trozo de La Tierra en Marte, lo que indica una historia geológica mucho más evolucionada de lo que se pensaba inicialmente.


Rocknest es una pequeña duna de fino material, el primero que SAM analizó en profundidad y la primera vez que se hacía a este nivel con suelo marciano. Dado que se trataba de material traido y acumulado por el viento no se esperaba encontrar señales de orgánicos ni de señales de un ambiente habitable, como así fue. A cambió detectó grandes cantidades de agua como parte integrante de la fina arena marciana. 

Curiosity Rover Makes Big Water Discovery in Mars Dirt, a 'Wow Moment'

Science Benefits From Diverse Landing Area of NASA Mars Rover

jueves, septiembre 26, 2013

Ecos de una luna torturada

Observatorios terrestres detectan una erupción volcánica masiva en Io.

"Cuando estás justo en el telescopio y ves los datos, puedes visualizarlo inmediatamente, especialmente cuando se trata de una enorme erupción como ésta. Es una erupción muy energética que cubre una región de más de 30 kilómetros cuadrados. Para la Tierra, es grande, y para Ío es muy grande también. En realidad es una de las erupciones más grandes que hemos visto". De esta manera se manifestaba la Dr Imke de Pater, de la Universidad de California en Berkeley, sobre su reciente descubrimiento, mediante el telesciopio Keck II de Mauna Kea (Hawái) de que algo de tremenda potencia había sacudido la torturada Ío, el más activo mundo volcánico del Sistema Solar, a mediados de Agosto.

Desde el paso de la Voyager 1 y 2 a principio de los 80 y la misión orbital Galileo, conocemos los volcanes de esta pequeña luna, no mucho mayor que La Luna pero cuyo interior es calentado por las intensas fuerzas de marea a las que se ve sometida tanto por parte de Júpiter como de sus compañeras Europa y Ganímedes, hasta el punto de generar una actividad volcánica tan intensa y fuera de control que literalmente ha borrado cualquier rastro de cráteres de impacto, alterando el aspecto de la superficie a un ritmo acelerado y generando alrededor del planeta un amplio anillo de partículas cargadas y ser uno de los responsables de las brillantes auroras que se generan en sus polos. Seco y ardiente, aunque al mismo tiempo gélido en los lugares alejados de los puntos más activos, nada supera a Ío en cuanto a espectáculo geológico y visual.

Sin ninguna sonda espacial desde el final de la Galileo que nos permita seguir teniendo imágenes de Io, los astrónomos han intentado seguir los cambios que en ella se produce, no directamente, ya que eso está fuera de los capacidades visuales de los observatorios actuales, pero si a través de sus emisiones en infrarrojo. Y es precisamente por esta "ventana" del espectro que el telescopio Keck detectó posibles fuentes de lava que brotaban de las fisuras de la región conocida como Rarog Patera, un acontecimiento aún más interesante cuando el equipo de Imke no pudo encontrar ninguna referencia a posible actividad previa en esta región, clasificada como un pequeño punto caliente en los datos de la Galielo y por observaciones desde La Tierra, pero muy por debajo de lo detectado el 15 de Agosto.

"Vimos una gran erupción en 2001, que ocurrió en la región Surt, y conocida como la más grande que haya sido observada. Para ésta, la energía total es menor, pero por metro cuadrado es mayor que la de 2001, así que es muy potente". Y, como parece en donde menos se esperaba, demostrando lo impredecible de los volcanes de Io, una pequeña isla de fuego en el helado reino joviano, tan diferente a sus compañeras orbitales como Titán lo es de las suyas.

Marzo de 1979, cuando La Tierra dejó de ser el único mundo conocido con volcanes activos.

Tanto a través de los ojos de la Voyager 1 (imagen superior), de la New Horizons o de la Galileo (imágen inferior) los volcanes de Io siempre han sorprendido y maravillado a los astrónomos.

El origen del intenso calor de Io parece estár en los efectos de las fuerzas de marea a los que está sometido tanto por parte de Júpiter como de sus 2 compañeras, Europa e Io, con las que está en resonancia, provocando un efecto acumulativo que finalmente se traduce en la acumulación de energía en su interior y en intenso vulcanismo del que semos testigos.

Major Volcanic Eruption Seen on Jupiter’s Moon Io

Enorme erupción volcánica en Ío

miércoles, septiembre 25, 2013

Una frontera de mil millones de años

Opportunity inicia su ascenso por las laderas de Solander Point.

Un pequeño paso en el espacio, un gran salto atrás en el tiempo. Así se puede resumir lo que representa pasar de las polvorientas llanuras a las laderas de una montaña, de los tonos brillantes de un terreno joven a la oscuridad que esconde las señales de lo que un día fue...en definitiva, de viajar de una época a otra en pocos metros. Y eso es precisamente lo que representa el viaje de Endeavour de este viajero incansable, que ahora se dirige rápidamente hacia las laderas donde pasará el Invierno que se aproxima.

Del largo viaje alrededor de la base de Solander Point, desde su parte interna hasta el lugar elegido para iniciar el ascenso, pocas panorámicas reflejan mejor el porqué del interés por el equipo científico de Opportunity por alcanzar este resto del antiguo anillo que conforma Endeavour, como en su momento representó llegar a Cape York, de naturaleza parecida pero mucho menor en tamaño y altura. Tomada en Sol 3431 (18 de Septiembre) ofrece, si uno es consciente de lo que está viendo, una maravillosa visión de la historia de Marte, desde el seco mundo actual hasta una época muy anterior, conocida como Era Noeica, donde el agua líquida y un ambiente mucho más habitable pudo hacer acto de presencia al menos en una ocasión. Puede que incluso en 2 etapas, como sugieren las observaciones de sondas orbitales como la MRO).

Situado justo sobre la frontera Opportunity tenía a su derecha en ese momento el terreno más joven, las arenas ricas en sulfatos, mientras que a la izquierda se van elevando los antiguos estratos rocosos de Solander Point, mucho más antiguos. Quizás 1.000 millones de años o puede que más, separan ambos extremos de la imagen. Sus ruedas se situaban en la misma frontera en el espacio y en el tiempo, entre el pasado y el presente, ofreciendo a este veterano explorador por primera vez la posibilidad de realizar no solo habituales taréas geológicas, sino también un estudio de la historia climática de Marte. Nada mal para un vehículo que está ya cerca de cumplir 10 años en el planeta rojo y que sigue enviado valiosos datos científicos a pesar de no contar ya con la totalidad de su equipo científico.

Solander Point está demostrando sobradamente que el esfuerzo de cruzar los 1.5 Kilómetros que le separaba de Cape York valían la pena, y que si es en este último se encontraron las primeras pruebas claras y definitivas de un antiguo ambiente acuoso neutro y habitable aquí las posibilidades son aún mayores. La intensa campaña de estudio inciada desde su llegada, como es el caso de "Poverty Bush", donde Opportunity utilizó su RAT (Rock Abrasion Tool) para limpiar la zona y aplicó el APXS (Alpha Particle X-ray Spectrometer) para recoger información sobre su composición, seguramente ofrecerá descubrimientos más que interesantes. Pero el tiempo corre.

El invierno se aproxima, las horas de luz solar se reducen y los niveles de energía disponible también están en descenso y llega la hora de ascender por la ladera Norte de Solander Point, donde la inclinación permitirá a los panales solares sacar más partido del lejano Sol, suficiente para que pueda sobrevivir a este dura etapa que se aproxima y donde permanecerá hasta que las condiciones mejores nuevamente. Un lugar de descanso ideal situado en 2 mundos diferentes, a pocos metros en el espacio pero a mil millones de años en el tiempo.


Una explicación más detallada de esta frontera en el espacio y en el tiempo.

Una visión aérea, formada por diversas fotografías panorámicas encajadas para dar forma a esta curiosa perspectiva.


Posición  de Opportunity en Sol 3431, cuando se tomaron las fotografías que conforman esta panorámica.

El viaje de Opportunity sobre una imagen tomada en Sol 3375, poco antes de la llegada a los límites de Solander Point.

Llegó la hora de ascender hacia el lugar de descanso invernal. 

Field Report From Mars: Sol 3431 - September 18, 2013

martes, septiembre 24, 2013

Entre las olas del océano estelar

 
El Sol de desplaza por el interior de una tenue nube de gas interestelar conocida como Local Fluff.

La confirmación de que la Voyager 1 había dejado atrás la zona bajo influencia directa del viento solar y se encontraba ya surcando el espacio interplanetario se convirtió rápidamente en una de las grandes noticias astronómicas del año, en especial por toda la carga simbólica que representa que, por primera vez, un vehículo construido por la Humanidad había traspasado por primera vez esa frontera invisible que nos separa y aísla del océano estelar. Pero para los científicos de la misión la llegada a este nuevo reino con una sonda aún operativa y capaz de seguir enviado datos al menos hasta 2020 es un regalo del que esperan grandes resultados. Y es que más allá del límite solar se extiende una región tan amplia como desconocida, y mucho más compleja de lo que podamos imaginar.

Y un buen ejemplo de ello lo tenemos en la conocida como Nube Interestelar Local (también conocida como Local Fluff, "Pelusa Local"), una amplia nube de gas extremadamente tenue, principalmente de Hidrógeno, y que presenta temperaturas de hasta 6.000 Cº, la misma que en la superficie del Sol, aunque su baja densidad, 0.3 átomos por centímetro Cúbico, hace que esta no sea relevante. En algún momento nuestra estrella penetró en este tenue bocanada de gas que parece fluir de la conocida asociación estelar Escorpio-Centauro, y de la que se espera salga en 10-20.000 años.

Desvelada a partir de los datos de IBEX (Interstellar Boundary Exporer satellite), que permite captar los átomos neutros energéticos que proceden de la frontera entre la Heliosfera y el medio interestelar generados por la interacción entre ambos, así como en observaciones de estrellas vecinas, ya que, aunque invisible, este nube absorbe algunas frecuencias de su espectro, pocos son los detalles que se conocen de ella con precisión, desde su extensión hasta su origen o efecto sobre el Sol y La Tierra, y reserva sorpresas como los cambios de dirección de este corriente de gas, que puede deducirse tanto de los datos de este observatorio como de misiones anteriores, como la sonda Ulysses.

La complejidad no se detiene aquí, ya que a su vez esta nube (y nosotros mismos) se encuentra dentro de lo que se conoce como Burbuja Local, un vacío en el medio interestelar con una densidad de solo 0.05 átomos por Centímetro Cúbico, y que podría ser el resultado de la explosión de diversas Supernovas hace millones de años, como Geminga. Fuera de ella la densidad aumenta hasta los 0.5 átomos, incluso por encima de la densidad de la Local Fluff, que destaca, precisamente, por navegar en un vacío aún mayor que ella misma.

La llegada de la Voyager 1 significa la posibilidad, aunque limitada, de estudiar este tenue bruma que nos rodea, aprender un poco más de ella ahora que tenemos la oportunidad, aunque sea durante unos pocos años, de navegar directamente en ella y no como el eco lejano que produce en las fronteras del Sistema Solar.

El fluir de esta nube afecta a la Heliosfera (o Astrosfera) de las estrellas vecinas tal como lo hace en la nuestra.

IBEX, desde la órbita terrestre, permitió observar el efecto del medio interestelar en la frontera de la Heliosfera, condicionada por su movimiento a través de esta nube de gas.

Volando a través del viento.

The Local Fluff 

IBEX - New Observations of Interstellar Matter - Briefing Materials

lunes, septiembre 23, 2013

Cuenta atrás hacia el planeta rojo

Mangalyaan, la primera sonda marciana de la India, será lanzada este próximo 28 de Octubre.

Heredera en muchos aspectos técicos de la ya desaparecida Chandrayaan-1, la primera sonda interplanetaria de la Indian Space Research Organisation (ISRO), su anuncio fue toda una sorpresa ya que el siguiente paso lógico parecia una nueva misión lunar que siguiera la estela de la primera y diera un paso más allá en su programa de exploración de nuestro satélite. Casi tanto como el momento del lanzamiento, a finales de 2013 para sacar partido a una posición favorable con respecto a La Tierra, pero que daba poco tiempo para su desarrollo y construcción, por lo que habían dudas sobre su viabilidad.

A pesar de todas estas dudas, la sonda Mangalyaan (nave marciana en Hindi) está ya cubriendo las últimas etapas de su preparación, hasta el punto de que ya tenemos fecha para el lanzamiento. Será este próximo 28 de Octubre desde el centro espacial de Sriharikota a bordo de un cohete lanzadera PSLV (Polar Satellite Launch Vehicle), cuando el primer intento de esta potencia emergente de alcanzar otro planeta inciará su largo viaje, permaneciendo en órbita terrestre entre 20 y 25 días antes de, en un último encendido de sus impulsores, inciar su vuelo interplanetario de 10 meses, que concluirá con su entrada en órbita marciana.

El objetivo principal de esta misión es demostrar la capacidad tecnológica de la India para realizar este tipo de misiones espaciales, por lo que llegar hasta Marte y entrar en órbita completando todas las etapas de navegación y comunicación sería suficiente para considerarla un éxito, pero no por ello está menos preparada para realizar una amplia actividad científicia con el equipo de instrumentos de los que está dotada, entre los que destaca el MSM (Methane Sensor For Mars), especialmente importante después de los últimos datos de Curiosity sobre este esquivo elemento.

Mangalyaan es una apuesta arriesgada de una potencia espacial cuyo mayor éxito hasta el momento había sido alcanzar La Luna con la Chandrayaan-1 y que algunos ven detrás de ella no tanto objetivo científicos como consideraciones geopolíticas, algo que rechaza K. Radhakrishnan, presidente de la ISRO (Indian Space Research Organisation)."No estamos compitiendo con nadie y la misión india a Marte tiene su propia importancia" señala, aunque reconociendo que hay algo de "orgullo nacional" involucrado en esta misión. 

Sea cual sean sus metas la llegada de una nueva participante en el campo de la carrera espacial es siempre una buena noticia, por lo que solo podemos desear toda la suerte del mundo para esta nueva exploradora marciana.

La sonda Mangalyaan en pleno proceso de ensamblaje en algunas de las primeras imágenes publicadas de ella.


El complejo viaje hacia sonda. El PSLV (Polar Satellite Launch Vehicle) no tiene potencia suficiente para poner a Mangalyaan en trayectoria directa, por lo que seguirá una serie de órbitas alrededor de La Tierra hasta adquirir suficiente impuslo para "saltar "hacia Marte. 

India's Mars mission: Mangalyaan to begin its 10-month journey on October 28

domingo, septiembre 22, 2013

Post Vintage (65): Las Tierras que no fueron

Que hubiera pasado si...
 
Con esta sencilla frase se puede resumir todo un género literario que se adentra en el concepto de una líneas histórica alternativa, intentando imaginar como sería el mundo si los acontecimientos hubieran seguido caminos distintos, si en momentos clave los dados del destino hubieran girado de forma diferente...se las llama Ucronías y abarcan todo tipo de escenarios posibles.¿Y si Hitler hubiera ganado la guerra, no hubiera triunfado la revolución rusa, el imperio romano hubiera sobrevivido hasta nuestros días o Japón no hubiera atacado Pearl Harbor? Las posibilidades son infinitas.

Pero ahora centrémonos en otro tipo de historias alternativas, las de caracter espacial y en concreto como habría sido nuestro planeta y la vida si las condiciones tanto de la Tierra como de su entorno hubieran sido diferentes. Veamos pués esos mundos que nunca fueron

1)¿Y si los dinonaurios, como grupo dominante, no se hubieran extinguido?

Posiblemente esta es la más intrigante de las posibilidades, pues todo parte de un acontecimiento concreto (el impacto de un asteroide en lo que hoy día es la península de Yucatán, hace unos 65 Millones de años, aunque algunos señalan las grandes erupciones ocurridas en el subcontinente Indio) que cambió el curso de la vida y su evolución futura.

¿De no haber ocurrido serían aún hoy día los amos del planeta? Al fin y al cabo habían sobrevivido durante los anteriores 160 millones de años, lo que denota una gran capacidad adaptativa, así que no resulta imposible imaginar que su reinado se habría extendido hasta la actualidad, aunque, claro está, no exactamente como eran en ese momento, pues la evolución habría seguido su camino. ¿Quizás habría surgido una especie inteligente, una civilización que ócuparía el lugar que hoy día ocupa la Humanidad, pero no de descendientes de los mamíferos, sino de los réptiles?

Lo que si parece claro es que dificilmente los seres humanos hubieran hecho acto de presencia. Los mamíferos existieron junto con los grandes réptiles, pero siempre a su sombra y sin un nicho ecológico donde expandirse y evolucionar se limitaron a criaturas no mayores que un roedor. No se les podía pedir más bajo la mano dominante de los señores de la Tierra...hasta que un acontecimiento acabó con este "imperio" y nuestros lejanos antepasados, ya sin ese muro, ocuparon el vacío dejado.

2)¿Y si Pangea no se hubiera fragmentado?  

La deriva continental es hoy día un hecho demostrado, así como la fragmentación de la corteza terrestre en placas, cuyo movimiento, destrucción y formación, determina el movimiento de los continentes. Y tanto las simulaciones informáticas como las evidencias geológicas y fósiles, entre los 300 y los 200 Millones de años, todos ellos formaron un único supercontinente, que con el tiempo se volvió a fragmentar.

De no haber ocurrido la vida posiblemente habría seguido caminos muy diferentes y mucho más pobre. No existiría tanta variedad de ambientes, por lo que la diversidad biológica habría sido mucho menor, ya que es, precisamente, en la fragmentación de la tierra emergida en diversos continentes e islas de todos los tamaños, y los hábitas aislados unos de otros que ello genera, donde esta el porqué de las millones y millones de especies existentes. Igualmente un enorme supercontinente sería necesariamente árido en buena parte de su superficie (como parece que ocurrió realmente en Pangea según los estratos rocosos) lo que aún habría más dificil el camino.

3)¿Y si la Luna nunca se hubiera formado?

La teoría más aceptada, y que cuenta con mayores evidencias a su favor, es la que indica que nuestra Luna nació tras un enorme impacto de un planeta del tamaño de Marte contra la recien nacida Tierra, aun fundida. De parte de los restos generados surgiría nuestra satélite, uno inusualmente grande en comparación a su planeta, lo que demuestra lo excepcional de su nacimiento.

Sin La luna y su lazo gravitatorio (mucho más intenso hace miles de millones de años, cuando se encontraba mucho más cerca) la rotación terrestre sería mucho más rapida, por lo que la vida, de haber aparecido, habría tenido que adaptarse a un ciclo día-noche extremadamente veloz, y posiblemente se vería obligada a seguir ciclos migratorios mucho más amplios que los que vemos hoy día en algunas especies, pues el eje de rotación mostraría un grado de inclinación mucho mayor, por lo que las estaciones serían realmente extremas.

Además, sin la estabilidad lunar esta inclinación cambiaría de forma espectacular con el paso del tiempo (como pasa en Marte, por ejemplo), lo que provocaría ciclos climáticos de intensidad devastadora.

Finalmente sin la Luna no habrían las grandes mareas (que en los inicios de la Tierra debieron ser gigantescas, dada la proximadad de nuestro satélite), lo que según algunas de las teorías que buscan entender el origen de la vida fueron un elemento vital para su aparición.

4)¿Y si La Tierra hubiera sido el doble de grande? 

Si nuestro hogar midiera unos 24.000 Kilómetros de diámetro, en lugar de los 12.000 que mide realmente, su masa sería 8 veces superior, y por ello la fuerza de gravedad terrestre, en superficie, sería el doble de intensa.

En este escenario la vida habría surgido igualmente, pero la adaptación evolutiva generaría formas de vida más sólidas, capaces de soportar su propio peso...las plantas tendrían, quizás, una mayor cantidad de fibra o habrían generado algun tipo de material distinto y más resistente, mientras que los animales quizás presentarían unas patas más gruesas, o quizás un mayor numero de ellas.

Finalmente el aspecto de los seres Humanos en este ambiente de alta gravedad está abierto a la imaginación, aunque es evidente que órganos como el Corazón deberían ser mucho mayores y más potentes, pues de lo contrario no podrían funcionar.


5)¿Y si el Sol apenas hubiera alcanzado la mitad del tamaño actual?

El brillo del Sol y de cualquier estrella esta directamente relacionado con su masa...cuanto mayor sea esta, más intenso es su brillo, mientras que en sentido contrario, su luz se hace cada vez más tenue.

Un Sol de estas caracteristicas sería una Enana Roja (la más abundante entre todos los tipos de estrellas), y su radiación luminosa, teñida de un tono rojizo, transmitiría mucho menos calor...tan poco que la vida en La Tierra, si esta se encontrara a la misma distancia en que se encuentra actualmente, simple y llanamente sería una esfera helada sumida en un sueño eterno. Quizas la vida podría surgir en las profundidades, aferrandose al calor que aun existiera en el corazón del planeta, pero es evidente que dificilmente pasaría de su estado más sencillo.

6)¿Y si el sistema Solar se hubiera formado en los bordes más lejanos de la Vía Lactea?

Se calcula que nos encontramos a unos 30.000 años luz del centro de la Galaxia, es decir, a 2/3 de los límites externos...lo que es más importante de lo que puede parecer, pues la "metalicidad" (la cantidad de elementos pesados existentes, todos aquellos que no sean los primordiales Hidrógeno y Helio) va decreciendo a medida que nos alejamos, siendo en los bordes de la Vía Lactea solo de 1/3 de la existente en nuestra región estelar.

Esto no habría impedido en nacimiento de La Tierra, pues incluso estas proporciones serían, segun los últimos cálculos, suficientes para darle forma a ella y a la vida tal y como la conocemos, pero las cosa podrían ser diferentes para los gigantes gasesoso como Júpiter, cuyo nucleos rocoso (10 veces la masa de nuestro planeta) habría crecido mucho más lentamente, por lo que posiblemente no habrían tenido tiempo para atraer hacia si una gran cantidad de gas antes de que este se dispersara, y como resultado no habría nacido el enorme Júpiter que todos conocemos.

Su ausencia habría tenido implicaciones notables para la vida en la Tierra, pues el gigante joviano, gracias a su intenso campo gravitatorio, actua como un escudo que la protege de un numero excesivo de grandes impactos. Por el otro lado también parece responsable de que algunos cometas terminen llegando y chocando con nuestro planeta, lo que es el origen de toda o parte del agua que hoy día cubre la superficie. Sin un enorme Júpiter "patrullando" en el exterior del Sistema Solar la vida en la Tierra lo tendría algo más dificil.

Estas son solo unas pocas de las inumerables variaciones del destino que podríamos imaginar...y es que el tiempo tiene caminos infinitos, todos los cuales, menos uno, no pasan de ser posibilidades que nunca fueron, y que solo con nuestra imaginación, posiblemente la herramienta más poderosa que tenemos, podemos acceder y explorar.

Júpiter, un tirano planetario pero también el "guardián" que protege el Sistema Solar interior.

La Tierra domianada por el Supercontinente Pangea..una inmensa superficie emergida rodeada de un superocéano aún mayor.

El impacto ocurrido en el actual Yucatán hace 65 millones de años: El final de la era de los réptiles y el principio de la era de los mamíferos.

La Luna, nuestra compañera y elementos clave para entender nuestro propio mundo.

What If a Giant Asteroid Had Not Wiped Out the Dinosaurs?

What If the Supercontinent Pangaea Had Never Broken Up?

What If a Giant Asteroid Had Not Wiped Out the Dinosaurs?

What If Our Solar System Had Formed Closer to the Milky Way's Edge?

sábado, septiembre 21, 2013

El último adiós de la conquistadora de cometas

La NASA declara oficialmente perdida a la Deep Impact.

El 4 de Julio de 2005 forma parte ya de uno de esos días señalados dentro de la historia de la exploración espacial, esos momentos fugaces en que el público y los medios de información, que no suelen darle toda la atención que se merecería, centraron su atención a una pequeña sonda interplanetaria que afrontaba una misión única, nunca antes realizada, el aproximarse y lanzar un proyectil contra el nucleo de un cometa, con el objetivo de poder estudiar su composición interna pero también para demostrar que la tecnología actual tenía la capacidad de realizar una operación tan extremadamente precisa como es alcanzar un cuerpo tan pequeño.

Y así ocurrió. La enorme pluma de partículas, que se elevó desde la superficie de Temple 1 ya forma parte de la galeria de las imágenes más icónicas de la carrera espacial. Deep Impact había completado su extraodinaria aventura, pero seguía en perfecto funcionamiento y lejos de dar por concluida su actividad siguió adelante, ahora bajo el nombre de EPOXI, afrontando nuevos retos, que tuvo en su encuentro con el cometa Hartley 2 un nuevo momento de esplendor y ejemplo de como una sonda espacial puede ser "reciclada", una vez alcanzados sus objetivos primarios, y avanzar hacia nuevos horizontes.

Pero en el espacio, con ingenios que dependen de un perfecto funcionamiento de sus sistemas para seguir operativos y en comunicación con La Tierra, nada es seguro, en especial para aquellos que han superado ya sus espectativas. Opportunity o las Voyager nos tienen mal acostumbras, pero lo cierto es que para ellas cada día es un regalo. Y para la Deep Impact estos se agotaron el pasado 8 de Agosto, cuando se comunicó por última vez. Y después el silencio.

Después de perder contacto los controladores de la misión pasaron varias semanas tratando de enviar comandos para reactivas sus sistemas, pero sin éxito. Aunque no se conoce la causa exacta de este final inesperado, los primeros análisis indican un posible problema potencial en el "reloj" del ordenador coentrar, que podrían haber dado lugar a la pérdida de control de la orientación de Deep Impact, y con ella la de sus antenas de radio y, fatalmente, la de sus paneles solares, impidiendo así que la nave espacial consiguiera acumular suficiente energía y provocando un descenso de la temperatura interna que resultó fatal para sus sistemas y baterías. Aunque quizás nunca sabremos exactamente lo ocurrido, es un recordatorio que la exploración interplanetaria nunca es sencilla.

Aunque el final de cualquier misión de forma inesperada y aún con objetivos por delante (la observación del cometa ISON) es siempre una triste noticia, Deep Impact superó ampliamente sus metas, alcanzado éxitos más allá de los esperados y por ello, con su final ya confirmado y a la hora de hacer balance no puede ser más positivo, tal como manifestó Lindley Johnson."A pesar de este inesperado final logró mucho más que nunca se imaginó. Cambió completamente lo que pensábamos que sabíamos acerca de los cometas y también proporcionó un tesoro de la ciencia planetaria adicional que será fuente de datos para la investigación en los próximos años".

Después de casi 9 años y 7.580 millones de Kilómetros después la Deep Impact viaja ya en completo silencio, en un sueño del que nunca volverá a despertar, pero sus imágenes y datos enviados a La Tierra siguen y seguirán asombrando, tanto como lo hicieron esa noche en que, a través de sus ojos, fuimos testigos de la primera ver como un objeto humano alcanzaba el corazón de un cometa. Y esa es el mejor prueba de su éxito imperecedero.

Por todo ello, gracias y hasta siempre, pequeña viajera.

Un instante para la historia. La cámara situada en el proyectil lanzado por la Deep Impact envió imágenes hasta pocos segundos antes del impacto, mientras la propia sonda registró la colisión.

La maniobra de aproximación y sobrevuelo a Tempel-1 representó todo un ejercicio de precisión, durante el cual la sonda avanzó directamente al encuentro del cometa para desviarse justo después de lanzar el proyectil.

Aunque la Deep Impact no pudo ver directamente el cráter que generó, ya que la cantidad de restos levantado fue superior al previsto, la sonda Stardust pasó cerca del cometa 6 años después y pudo confirmar la presencia de la huella, aunque apenas visible, de lo ocurrido.

La historia de la Deep impact estará ligada para siempre a este momento.

El 4 de Noviembre de 2010, 5 años después de su encuentro de con la Tempel 1, la Deep Impact sobrevoló el cometa Hartley, 2, logrando imágenes casi tan espectaculares, mostrando un cuerpo extraño con forma de cacahuete, en lo que parecían 2 cuerpos unidos por un puente de materia inactiva.  Podrían ser dos planetesimales que quedaron unidos después de una colisión a baja velocidad.

Entre el  28 y 29 de Mayo de 2008 la Deep Impact, que se encontraba a solo 50 millones de Km de distancia, observó el tránsito de la Luna por delante de La Tierra.

En su viaje alrededor del Sol la Deep Impacto tuvo la oportunidad de realizar observaciones lejanas, como esta de M51, conocida como la galaxia remolino por razones evidentes.

El cometa ISON, que la Deep Impact tenía planeado observar desde la distancia en su viaje hacia el Sol, debería haber sido su siguiente y quizás último objetivo, fotografiado a principios de 2013.

An Unexpected Ending for Deep Impact

NASA's Deep Space Comet Hunter Mission Comes to an End