Esperanza para el futuro

La sonda Hope, en órbita marciana.

El tren de nuevas misiones hacia el planeta rojo está alcanzando su destino, y la primera de ellas, la pequeña, modesta, pero de un mérito tremendo viniendo de parte de una nación sin experiencia previa en este tipo de eventos interplanetarios, ya se encuentra ligada gravitatoriamente a su nuevo hogar. Toda un mensaje cargado de positividad de cara a lo que está por venir.

A las 15:57 UTC de este pasado 9 de Febrero cuando la señal de la Hope confirmaba que la operación de inserción orbital, iniciada 27 minutos antes con el encendido de sus seis propulsores para frenarla desde los 121.000 Km/hora con los que se estaba aproximando al planeta, hasta los 18.000, suficientemente baja como para permitir su captura, había concluido con éxito, y los Emiratos Árabes Unidos, y por extensión todo el mundo islámico, podían presumir ya de haber dado su primer paso más allá de la Tierra. Todo ello de forma autónoma, ya que los 11 minutos que retraso en las comunicaciones impedía intervención humana alguna. Solo quedaba esperar que ella lo lograra por si misma. Y así lo hizo.

"La inserción en la órbita de Marte fue la parte más crítica y peligrosa de la misión, ya que la sonda Hope estuvo expuesta a tensiones y presiones a las que nunca antes se había enfrentado. Si bien hemos pasado seis años diseñando, probando sin descanso el sistema, no hay manera de simular completamente el impacto que produce la desaceleración y la navegación necesarias para alcanzar la inserción en la órbita de Marte de forma autónoma", explicaba Omran Sharaf, director de la misión.

Una vez alcanzado su destino, la sonda entrará ahora en una fase previa para preparar la exploración del planeta, poniendo a punto todos sus instrumentos para el estudio de la atmósfera de Marte, así como para ir ajustando su órbita hasta lograr situarse en la ideal para su actividad científica. Se espera que en Abril empiece a trabajar en serio y pueda demostrar su valía, con la publicación de los primeros resultados en Septiembre.

Con el éxito de la Hope se inicia unos días de extraordinaria actividad, con la misión china Tianwen a horas de alcanzar el planeta rojo y el rover Perseverance a solo 8 días de distancia. La población de exploradores robóticos, un poco huérfana después del final de Opportunity, crecerá de nuevo, afianzando a Marte como el mundo con mayor presencia de tecnología humana fuera de la Tierra, el más explorador y, en definitiva, el que está marcado para ser el primer en que los humanos pongamos nuestros pies. Esa es la esperanza que todos tenemos, nunca mejor dicho.

La llegada de Hope al planeta rojo.

La sonda Hope de Emiratos alcanza la órbita de Marte