Quedan menos de 2 años para que reciba la visita de la New Horizons, y una vez más este lejano mundo no deja de ofrecer descubrimientos inesperados a la comunidad astronómica mundial. Primer fue de su amplia familia de lunas y la posibilidad de que pueda existir algún tipo de anillo de partículas a su alrededor, seguido por cambios en el color de zonas de la superficie, detectados por el Hubble y relacionados con el cambio estacional. Y ahora, una vez más, el antes conocido como 9º planeta del Sistema Solar parece dispuesto a demostrar que el esfuerzo técnico y económico de enviar una sonda para visitarlo vale la pena, y que lejos de ser un lugar gélido y aburrido, su encuentro ofrecerá unos de los momentos más emocionantes de los próximos años.
Uno de los motivos para lanzar a la New Horizons era alcanzar Plutón a tiempo de observar su atmósfera de Metano e Hidrógeno, detectada en una serie de ocultaciones estelares en los años precedentes, antes de que está se congelara de nuevo una vez el planeta se alejara de Sol, ya que su órbita es tan elíptica que la distancia al en su Afelio es el doble que durante su Perihelio, ocurrido precisamente en 1990. Con la fecha del encuentro situada en Julio de 2015, se llegaría 25 años después de ese momento, por lo que no era clara que llegara a tiempo. Con suerte aún existiría a niveles suficientes para ser considerada como tal, aunque en rápido declive. En el peor de los casos ya se habría colapsado por completo, precipitándose congelada en la superficie, quedando solo pequeñas trazas, parecidas a la Exosfera de La Luna y Mercurio.
Sin embargo no es esto lo que está ocurriendo en absoluto. Las repetidas ocultaciones estelares observadas a lo largo de los últimos años, incluida una tan cercana en el tiempo como es el pasado 4 de Mayo, muestran que esta se mantiene, con pequeñas variaciones, estable, a pesar de que la distancia al Sol no deja de aumentar. Ante esto el único modelo que podría explicar semejante comportamiento es que exista un casquete polar norte permanente, ya que bajo esta premisa la atmósfera nunca llega a desaparecer. Aumenta y disminuye, pero nunca se derrumba, con un máximo de presión situado entre 2020 y 2040, lo que encaja más con lo observado.
Quedan menos de 2 años para que la New Horizons sobrevuele Plutón y obtenga imágenes detalladas de su desconocida superficie, incluida la actual distribución de los hielos. Y cada día que pasa ese momento cada vez genera más expectativas, la de un mundo lejano, tanto tiempo visto como la frontera final del Sistema Solar y que, lejos de haber perdido atractivo con el descubrimiento de muchos otros pequeños mundos más allá, no deja de acumularlo.
La órbita de Plutón es extremadamente elíptica, hasta el punto de que la distancia se reduce a la mitad durante su Perihelio, aumentando progresivamente hasta el doble de esa distancia en el Afelio. Los modelos climáticos imaginados se basan en el marcando cambio en la radiación solar recibida a lo largo de su extenso año, equivalente a 249 terrestres.
Posibles modelos climáticos para Plutón. En el superior, con una gran cantidad de Nitrógeno y de inercia térmica más grande, un casquete polar norte persiste durante todo el año. Las ocultaciones estelares apuntan hacia este primer caso, lo que implica la presencia de una atmósfera a lo largo de todo el año con presiones por encima de 1 Microbar. En los otros casos este se reduce en gran medida o se desvanece rápidamente después del perihelio.
Plutón nos espera..¿que sorpresa nos esperan?
Pluto's atmosphere does not collapse
2 comentarios:
Para mi sigue siendo el noveno planeta , siempre lo fue y lo será , si para unos pocos Mercurio es un planeta entonces Plutón también . Es la asignatura pendiente en éste siglo 21 . Voyager 1 hasta Saturno , Voyager 2 hasta Urano y Neptuno , por fin conoceremos el patio trasero de nuestra casa , estoy esperando la llegada de la New Horizons y que sorpresas nos dará .....
Para mi también Plutón siempre será un planeta, y estoy deseando ver las fotos de la New Horizons :)
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