Marte es el escenario perfecto para la pareidolia, la tendencia de nuestra mente a reconocer erróneamente formas reconocibles en nuestro entorno. La mística que rodea al planeta rojo desde los albores de la astronomía moderna, visto durante tanto tiempo como posible hogar de civilizaciones alienígenas, presentas o pasadas, hacen que sea casi incontables las personas que, desde el altavoces de la red, afirman haber encontrado todo tipo los objetos, ruinas, organismos o cosas aún mas exóticas al observar las fotografías tomadas por los diversos exploradores allí enviados. Un examen crítico es suficiente para apreciar el error, pero el deseo de que sea verdad muchas veces se suele anteponer a la realidad.
Sin embargo cuando esto llega de la mano de una geobióloga de prestigio, con un razonamiento y estudio detrás de sus conclusiones con cierta solidez, no se puede hacer otra cosa que prestarle una justa atención. Al fin y al cabo lo que ahora presenta Nora Noffke, de la Universidad de Old Dominion en Virginia, no es descabellado teniendo en cuenta los recientes descubrimientos de Curiosity, con evidencias claras de que en Gale existió un medio ambiente adecuado para la vida durante un tiempo geológico extensos. Según ella existen posibles (que no seguras) señales de actividad biológica fosilizadas en rocas observadas en Yellowknife Bay, en el lecho de un lago seco denominado Gillespie, y que se cree era escenario de inundaciones estacionales.
En La Tierra, los científicos han estudiado restos fósiles que forman estructuras conocidas como MISS (microbially-induced sedimentary structures), que se suelen encontrar en entornos de aguas pocos profundas, como lagos o zonas costeras de todo el mundo. Este tipo de fósiles también se han localizado en las rocas terrestres más antiguas, algunas de ellas, en Australia Occidental) que poseen más de 3.480 millones años. Y es aquí donde Nofflke detalla las sorprendentes similitudes morfológicas entre las estructuras sedimentarias de Marte fotografiadas en el afloramiento Gillespie y las estructuras microbianas de nuestro planeta."En una imagen, vi algo que me parecía muy familiar. Así que me tomé mi tiempo para examinarlo mejor, lo que significa que pasé varias semanas investigando ciertas imágenes centímetro a centímetro, dibujos, bocetos, y comparándolos con los datos de las estructuras terrestres. Y he trabajado en este área durante 20 años, así que sabía qué buscar".
Los patrones de distribución de las MISS varían dependiendo del lugar donde se encuentran, y los encontrados en Gillespie son consistentes con las estructuras microbianas encontradas en ambientes similares terrestres. Además estas últimas cambian de un modo específico con el tiempo. Cómo se forman los tapetes microbianos, crecen, se secan, se agrietan y vuelven a crecer, hace que se conviertan en estructuras específicas asociadas con dichos ambientes. Aquí, de nuevo, Noffke encontró que el patrón de distribución de las rocas marcianas corresponden con estructuras microbianas de La Tierra que han cambiado con el tiempo.
Noffke no afirma en ningún momento que este sea su origen, señalando que solo plantea una hipótesis a partir de lo observado, "pero si las estructuras marcianas no son de origen biológico, entonces las similitudes en la morfología y en los patrones de distribución con respecto a La Tierra serían extraordinariamente coincidentes".
El equipo científico de Curiosity, evidentemente, también se dieron cuenta de tales estructuras, pero sus conclusiones fueren totalmente opuestas. "Realmente no vimos nada que no se puede explicar por los procesos naturales de transporte fluvial, y la naturaleza de las rocas sugirió que se trataba de una piedra arenisca fluvial", explica Ashwin Vasavada. "Tenemos varios miembros de nuestro equipo que siempre están dispuestos para descubrir cosas que puedan ser causadas por procesos biológicos, pero sentíamos que no había ninguna razón para explorar esa opción en ese lugar",agregó."Se redujo a nada excepcional, desde nuestro punto de vista no era más que una consecuencia de la erosión de esta piedra arenisca". En su lugar Curiosity extrajo muestras de una capa de material fino llamada Sheepbed, situada directamente por debajo de Gillespie y perteneciente también a Yellowknife Bay, encontrado evidencias de antiguos entornos biológicamente adecuados para la vida y detectando las primeras señales de materia orgánica, aunque en ese momento aún había dudas de si era indígena o contaminación terrestre de los instrumentos.
¿Cual es la explicación más plausible? Las dos se apoyan en el estudio y análisis cuidadosa de las imágenes disponibles, aunque ciertamente Noffke parece haber dedicado más tiempo y realizado una exploración más completa, incluida comparaciones entre ambos mundos. Sin embargo dar una respuesta definitiva, aunque podría ofrecer evidencias que reforzaran una de ellas, está fuera del alcance de Curiosity. En La Tierra, los científicos confirman la naturaleza biológica de las estructuras microbianas en los sedimentos mediante la búsqueda de texturas microscópicas específicas, método que consiste en cortar las rocas en rodajas extremadamente finas y estudiarlas bajo un microscopio, algo que solo podría realizarse, a menos que fuéramos capaces de adaptar la tecnología necesaria en una sonda enviada a Marte, con una misión de retorno de muestras a La Tierra, precisamente aquello por lo que suspiran tantos astrobiólogos.
De momento solo nos queda comparar imágenes, buscar en ellas con atención, presentar hipótesis y esperar el día en que seamos capaces de realizar, sea directamente en Marte o en laboratorios terrestres, los análisis profundos de rocas marcianas que serían necesarios para responder a estas y otras incógnitas. Pero sin dejarnos arrastrar por lo que quisiéramos ver, a riesgo de cruzar la tenue frontera que separa la exploración planetaria sería de la fantasía. Aunque ciertamente no es sencillo, ni para la mente más racional, abstraerse de ella completamente.
Comparación entre estructuras terrestres creadas por la actividad bacteriana encontrados en Australia y las observadas por Curiosity. ¿Son también estructuras de origen biológico o por el contrario puramente geológicas, fruto de la antigua actividad fluvial?
This Curiosity Image Suggests Microbial Life Once Existed On Mars
En cuanto pareidolia, mira la tortuga de alta velocidad entre las fotos de Spirit de 2008.
ResponderEliminarsigo pensando que la mejor evidencia de un posible fósil marciano la obtuvo el rover Opportunity durante el sol 34 de su permanencia en Meridiani Planun en Marte la imagen microscopica fue tomada con la cámara B&W CCD y muestra lo que parece un fósil con una cabeza bien definida y cuerpo segmentado muy parecido a los fósiles de crinoideos en la Tierra lástima que la Nasa no le dió mayor importancia a excepción de algunos cientificos como el astrobiologo Richard Hoover dejo el link de la imágen:
ResponderEliminarhttps://mars.jpl.nasa.gov/mer/gallery/all/1/m/034/1M131201538EFF0500P2933M2M1.JPG
https://mars.jpl.nasa.gov/mer/gallery/all/1/m/034/1M131201538EFF0500P2933M2M1.HTML