Un ciclo sin fín

El aparente viaje del Sol llega su punto culminante, y con ello el cambio de estación...para los habitantes del Hemisferio Norte llega la noche más larga y el inicio de la estación invernal, todo lo contrario que para los habitantes del Sur, para los cuales el astro rey llega a su punto más alto, los dias alcanzan su máxima extensión y empieza el Verano: Llegamos al Solsticio.

Detras de todo ello se encuentra la inclinación del eje terrestre, que provoca, a medida que la Tierra completa su viaje alrededor del Sol, que la altura de este en el firmamento y con ello las horas de luz y oscuridad varíe considerablemente, tal como podemos ver en la imagen inferior: Ahora mismo nos encontramos en la posición que vemos a la derecha de ella, con el Polo Norte apuntando hacia las estrellas (y sumido en una noche sin fín) y el Polo Sur inclinado en dirección al Sol.

El resultado es evidente...mientras que en el Hemisferio Norte el Sol se mantiene bajo en el Horizonte y las horas de oscuridad dominan, en el Sur este alcanza su máxima altura y es la luz la que exitende su reinado. El Invierno y el Verano empiezan. Es el ciclo de las estaciones.