sábado, mayo 16, 2020

La fría huella de Fobos

Observando la sombra de un eclipse marciano.

La Tierra tiene el inmenso regalo de la mecánica celeste de que tanto la estrella alrededor de la cual gira como la gran luna que la acompaña en su viaje se ven, desde su cielo, del mismo tamaño aproximado, lo que origina un tipo único de eclipses solares, lo que llamamos "Anillos de diamantes". Una hermosa carambola celeste que ocurre justamente en los tiempos de la Humanidad, ya que antes La Luna estaba mucho más cerca, y por lo tanto no se apreciaba tal fenómeno, y estará más lejos en el futuro, por lo que en algún momento los eclipses totales dejarán de existir. A escala cómica vivimos un momento afortunada en este aspecto.

Marte también dispone de sus lunas, aunque tan pequeñas que nunca pudieron ni soñar en rivalizar con lo que ocurre en la Tierra. En el planeta rojo solo ocurren eclipses parciales, momentáneos tránsitos en que una oscuridad tenue pero medible recorre la superficie. Tanto Opportunity como Spirit y Curiosity nos ofrecieron imágenes de esos momentos, cuando Fobos, la mayor de las dos lunas, cruzaba por delante del disco solar, proyectando su sombre en el proceso. A su manera, aunque sin la magia de los terrestre, tiene su propio encanto.

La InSight, que sigue trabajando en el estudio del interior del planeta, no puede mirar directamente al Sol como si podían sus compañeras de aventuras. Su objetivo está bajo la superficie, no arriba en el cielo, y sus cámaras, pensadas para apoyar las operaciones, no disponen de los filtros adecuados. Pero eso no significa que este por completo ciega a estos eventos, como se pudo comprobar recientemente, cuando estas registraron una caída de la luz solar de unos 30 segundos de duración. A esto le acompañó un descenso del 20% en la producción de energía de sus paneles solares durante esos instantes y de unos grados centígrados en la temperatura de la superficie.

Así, sin ofrecer imágenes directas, la InSight nos ofreció una visión amplia de un eclipse solar marciano y su fría huella de oscuridad. Nada mal para algo pensado para estudiar las profundidades, no el firmamento.
Así se ve un eclipse marciano, con Fobos transitando por delante del Sol. El rover si está preparado para observar directamente el Sol, algo más pequeño y débil que visto desde la Tierra, pero aún extremadamente brillante.

La misión Insight registra los efectos de un eclipse solar en Marte

No hay comentarios:

Publicar un comentario