Tambora, la mayor erupción volcánica registrada en la Historia de la Humanidad.
"Tuve un sueño, que no fue un sueño.
El sol se había extinguido y las estrellas
vagaban a oscuras en el espacio eterno.
Sin luz y sin rumbo, la helada tierra
oscilaba ciega y negra en el cielo sin luna.
Llegó el alba y se fue.
Y llegó de nuevo, sin traer el día.
Y el hombre olvidó sus pasiones
en el abismo de su desolación.(…)"
Asi comienza Darkness (Oscuridad), escrito por Lord Byron, ciertamente cargado de meláncolia y tristeza, este poema es interesante, ya que lejos de ser fruto unicamente de un estado de ánimo personal del poeta inglés, se inspira en una situación real que afectó al mundo que le rodeaba. En sus líneas se puede intuir el terrible Verano de 1816, quizás una de las últimas grandes crisis de supervivencia a la que debió enfrentarse el mundo occidental. Sequías, lluvias, nevadas...fue extremadamente frío y lluvioso, y las desastrosas pérdidas que esto causó en la agricultura llevó al hambre a un continente ya de por si arrasado por las recientemente concluidas guerras napoleónicas, a lo que se añadió la aparición de epidemias de cólera, que pudieron extenderse con relativa facilidad dado el estado de debilidad que la hambruna provocó en buena parte de la población.
En Gran Bretaña se abolió el impuesto a las ganancias por la escasez de alimentos, en Suiza sufrieron tanta hambre que llegaron a comer musgo y en Alemania, Kart Drais inventó el draisine, un predecesor de la bicicleta, tratando de ahorrar el dinero que costaba alimentar a los caballos. Por su lado Irlanda sufrió lluvias practicamente sin pausa que se relacionaron con la epidemia de Tifus que vivió el país entre 1816 y 1819. Pero no solo Europa sufrió esta serie de desgracias.Estados Unidos, China y La India también se vieron golpeados de forma devastadora por un clima hostil que afectó gravemente a la agricultura.
Todo ello bajo unos cielos extraños, con puestas y salidas del Sol que se describieron como espectaculares, teñidas de tonalidades naranjas, rojas, púrpuras e incluso rosas...
¿Que ocurrió en 1816, conocido como "el año sin Verano"? La respuesta estaba muy lejos de los desconcertados europeos, en una isla de la aún no del todo conocida Indonesia, llamada Sunbawa. Y es que en ese rincón del mundo, un año antes, entre 10 y 11 de Abril de 1815, tuvo lugar la mayor erupción volcánica registrada por la Humanidad, el volcán Tambora, cuya potencia superó ampliamente, hasta por un factor de cuatro, la del Krakatoa, más famosa y mejor documentada al ocurrir décadas después.
Fue el desenlace fatal de varios meses de actividad creciente, que tuvieron su cataclísmico final cuando a las 7 de la tarde hora local la mayor parte deTambora, de forma literal, se desintegró, convertido en una masa de fuego, humo y ceniza. La que había sido una montaña de más de 4300 metros de altura quedó reducida apenas a 2800.
La detonación pudo escucharse a 2.600 kilómetros de distancia y la ceniza se extendió hasta los 1.300 kilómetros, mientras los flujos piroclásticos aniquilaban todo lo que pudiera existir hasta 20 Kilómetros alrededor de la cima. Entre 50 y 70.000 personas (aunque el número exacto nunca lo sabremos) perdieron la vida, tanto de forma directa por la erupcion como por el hambre que asoló posteriormente Sunbawa y las islas cercanas. Pero esta hecatombe afectaría a todo el planeta. La columna de cenizas se elevó hasta los 44 Kilómetros de altura, donde la mayoría permanecería durante meses e incluso años, y pronto los vientos empezarían a extenderlas por todo el planeta. Ya en la segunda mitad de 1815 se apreciaron los efectos ópticos por ellas causadas, en especial con puestas y salidad de Sol cada vez más espectaculares.
Sin embargo, como ya hemos visto, lo peor aún estaba por llegar y 1816 se convertiría en el año donde el clima pareció volverse contra la Humanidad, donde el frío, la lluvia y el hambre cubrieron el mundo con un manto de oscuridad. El que Lord Byron plasmó para la posteridad en forma de un poema.
La caldera volcánica de Tambora, lo que queda de una montaña de más de 4000 metros que literalmente se volatilizó en la mayor explosión volcánica conocida. Lejos de haber significado el final del volcán, su actividad sigue siendo hoy día manifiesta.
Las descripciones que nos han llegado hablan de que, a las 7 de la tarde, hora local, hasta tres columnas de fuego ascendieron desde Tambora mientras el propio volcan se desintegraba. Igualmente las crónicas mencionan la enorme nube negra que se extendía sobre el y que siguió observándose hasta días después de la detonación.
Erupción del volcán Tambora (1815)
¿Qué pasó en 1815?
Buenas, hay varios fallos en la entrada:
ResponderEliminar"en una isla de la , en ese momento,"
" la volcan Tambora"
"la del Karakatoa"
Un saludo.
Corregido ;)
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