miércoles, noviembre 27, 2013

Visitando nuestro hogar galáctico

Desde su luminoso y al mismo tiempo oscuro corazón hasta sus límites exteriores.

Nos encontramos ya en la recta final para el lanzamiento del telescopio espacial europeo Gaia, que a lo largo de los 5-6 años previstos inicialmente para completar su misión, nos permitirá crear el más amplio y completo mapa tridimensional de la Vía Láctea, mapeando la posición y desplazamiento aparente de aproximadamente 1000 millones de estrellas, además de reunir información sobre su brillo y composición química. Un trabajo que será de un valor extraordinario para entender con mayor detalle tanto la estructura actual de nuestro hogar galáctico como su evolución a lo largo del tiempo.

Por ello la ESA (Agencia espacial europea) nos invita a un viaje por los distintos elementos que integran la Vía Láctea, comenzando en la mas profunda oscuridad, el agujero negro masivo que habita en su corazón, y las estrellas que orbitan a su alrededor, moviéndose al borde de un abismo sin fin. De ahí nos vamos alejando, cruzando el llamado bulbo central, donde se agrupan unas 10.000 millones de estrellas, principalmente perteneciente a la conocida como Población II, pequeñas, rojas y viejas, miembros veteranos de las primeras generaciones estelares, de las que sobreviven precisamente las que por su pequeño tamaño y temperatura tiene una esperanza de vida extremadamente larga, mientras que las mayores y más brillantes desaparecieron hace tiempo.

El recorrido prosigue a través del disco galáctico, formado por una población estelar más joven que alberga la mayoría de las estrellas de la Vía Láctea y que está inmerso en un disco gaseoso ligeramente mayor. Estas se disponen formando un patrón de brazos espirales, y orbitan el centro de la galaxia. Es aquí donde se encuentra el Sol y La Tierra.

Alejándonos aún más observamos como el disco y el bulbo están insertos en el halo estelar, una estructura esférica que consiste en un gran número de cúmulos globulares, formados por las estrellas más antiguas de la galaxia, parecidas a las que encontramos en las zonas centrales de la galaxia pero concentradas en un volumen de unos pocos pársecs cúbicos, por lo que su población presenta una alta densidad. También encontramos muchas estrellas aisladas, condenadas a una soledad más allá de todo lo imaginable. Una hipotética civilización que viviera en un planeta situado en alguno de estos soles solitarios disfrutarían de unos cielos de belleza espectacular, pero al mismo tiempo, si no es que dispusieran de una tecnología capaz de superar esas barrera de vacío, totalmente fuera de su alcance.

Finalmente, aunque aquí ya entramos en el terreno de la suposición, se infiere la presencia de un halo aún mayor de materia oscura, cuya atracción gravitatoria afecta el movimiento de las demás estrellas de la galaxia, haciendo que su velocidad orbital permanezca estable a pesar de que aumente la distancia al centro galáctico Finalmente, en una visión frontal de la Vía Láctea, podemos ver señalada la posición de nuestro Sol, situado a unos 26000 años luz del centro galáctico. 

El viaje termina mostrando las observaciones de la misión de la ESA Hipparcos, que midió más de 100.000 estrellas a hasta 300 años luz de distancia del Sol. Gaia mapeará 1.000 millones de estrellas hasta a 30.000 años luz de distancia, por lo que representará un salto adelante colosal en el campo de la astrometría. La Vía Láctea, la galaxia dentro de la cual habitamos y, por eso mismo, la que menos conocemos realmente al no disponer de una perspectiva exterior, como si ocurre con todas las demás, ya no será la misma.

Gaia levantará el mayor mapa tridimensional de la Vía Láctea, multiplicando de forma exponencial los logros de misiones anteriores. 


Micro-documental sobre Gaia, donde se explica de forma muy simplificada qué es, qué misión desarrollará y cómo determinará la astronomía del las próximas décadas.

El gran mapa de la Vía Láctea, que Gaia llevará a otro nivel. 

Guia de la Vía Láctea

No hay comentarios:

Publicar un comentario