Es un mundo abrasador, con temperaturas medias que rondan los 475 Cº que le convierten en el planeta más caliente del Sistema Solar, por delante incluso de Mercurio, pese a que este último se encuentra más cerca del Sol...envuelto en una sofocante atmósfera compuesta en su mayor parte de Dióxido de Carbono, que atrapa la mayor parte de la radiación solar, generando un efecto invernadero fuera de control ,y aplasta la superficie con presiones equivalentes a 90 veces la que se registran en La Tierra a nivel del mar, todo en Venus parece estar sometido al calor más extremo. O casi todo.
A 125 Kilómetros de altura, como desvelan ahora los datos acumulados por la Venus Express, encontramos lo impensable. Una capa atmosférica extremadamente fría, con temperaturas que podrían situarse en los -175°C, o lo que es lo mismo 650 Grados centígrados inferior a las que se registran a nivel de la superficie. Tan gélida que incluso es posible que en ella exista, lo que es aún más sorprendente, nieve carbónica, Dioxido de Carbono helado como el que podemos ver en Marte. Pero Marte esta lejos de ser el "infierno planetario" que es Venus.
Este descubrimiento se realizó midiendo la luz del Sol que se filtra a través de la atmósfera de Venus, para así determinar la concentración de moléculas de Dióxido de Carbono a distintas altitudes a lo largo del terminador, la línea de separación entre la parte iluminada y la parte nocturna del planeta. Al combinar las medidas de la concentración de Dióxido de Carbono con los datos de la presión atmosférica, los científicos fueron capaces de deducir el perfil de temperaturas de la atmósfera de Venus.
"Como a una determinada altitud la temperatura cae por debajo del punto de fusión del dióxido de carbono, sospechamos que se podría llegar a formar nieve carbónica en esta región de la atmósfera venusiana", explica Arnaud Mahieux, del Instituto Belga de Aeronomía Espacial.
Unas hipotéticas nubes de partículas de nieve o hielo de Dióxido de Carbono tendrían que ser muy reflectantes, y ciertamente la Venus Express está observando regiones notablemente brillantes en la atmósfera venusiana.¿Podrían estar relacionados? Quizás, pero como explica Mahieux, aún es pronto para sacar conclusiones:"Aunque Venus Express haya observado regiones muy brillantes en la atmósfera de Venus que podrían indicar la presencia de hielo, también podrían ser el resultado de otras perturbaciones atmosféricas, por lo que de momento tenemos que ser prudentes".
Los datos de la Venus Express también descubrieron que esta "oasis frío" a lo largo del terminador se encuentra "emparedado" entre dos capas relativamente más cálidas: "Los perfiles de temperaturas en la cálida cara iluminada del planeta y en la fría cara que se encuentra a la sombra son extremadamente diferentes a partir de los 120 kilómetros de altitud. El terminador es una región de transición, afectada por las condiciones a ambos lados. A lo largo del terminador, la cara en sombra podría jugar un papel importante a una determinada altitud, y la cara iluminada un papel incluso mayor a otras altitudes" .
Es un descubrimiento muy reciente, del que aún no se tiene claro la causa ni lo que representa, por lo que uno de los primeros pasos será examinar el papel que juegan los otros compuestos químicos presentes en la atmósfera de Venus, tales como el monóxido de Carbono, el Oxígeno o el Nitrógeno, elementos que en la parte alta de la atmósfera venusiana pueden son incluso más abundantes que el propio Dióxido de Carbono. Lo que si está claro es que el perfil de temperaturas de Venus es totalmente diferente a los que se registran a lo largo del terminador de La Tierra o de Marte, cuyas atmósferas presentan unas composiciones químicas y condiciones térmicas muy diferentes,
Estamos ante algo único, el frío más intenso en el calor más abrasador, de este planeta singular, casi tan grande como el nuestro, que posiblemente en el pasado pudo disponer de un clima mucho más acogedor, incluso, según se deduce de la composición química de su atmósfera, con océanos, pero que hoy día es lo más parecido a un horno planetario, aunque de lejos, al amanecer o al atardecer, su resplandor en los cielos del ocaso haga que lo consideremos uno de los objetos celestes más hermosos del firmamento.
Una curiosa capa fría en la atmósfera de Venus
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