lunes, noviembre 30, 2015

Soñando con Universos electrónicos

Contact, el videojuego diseñado por Carl Sagan que nunca conocimos.

No es necesario presentar a una de las figuras científicas más relevantes de las últimas décadas, quizás no tanto por su labor como tal, sino por el esfuerzo que siempre puso en aproximar la ciencia a la gente de la calle, manteniendo firmemente la convicción, a pesar de la oposición de no poca parte de sus colegas, que no veían con buenos ojos lo que consideraban como una forma de vulgarizara, de que la auténtica misión de los científicos no era solo avanzar en sus respectivos campos, sino ser capaces después de divulgarlo de forma sencilla y atendible a la población en general. De lo contrario no solo se estaba traicionado el espíritu mismo de la ciencia, sino que se arriesgaban a que esta quedara aislada en la cima, estigmatizada como algo solo de una minoría.

Sagan siempre sería fiel a este objetivo, y sus logros influenciaron a muchos a seguir el camino del conocimiento. Entre ellos el que aquí escribe. Una veintena de libros de divulgación, entre los que destaca evidentemente la maravillosa Cosmos, y su no menos maravillosa versión televisiva, que el mismo presentó, y cuyo recuerdo aún vive intensamente en muchos de nosotros, forma parte de su legado.

Pero mucho menos conocido fue su intento, que desgraciadamente no paso del plano de las ideas, de llevar esta divulgación al terreno de los videojuegos, como ahora conocemos gracias a una serie de documentos personales donados en 2012 a la Library of Congress en Estados Unidos, al que posteriormente se tuvo acceso pare descubrir las semillas, que jamás germinaron, del videojuego Contact, basado en su propia novela del mismo nombre, la única de ciencia ficción que jamás escribiría. Una historia maravillosa donde Sagan volcó, además de muchos conceptos científicos para que así fuera también una fuente de divulgación, muchas de sus ideas, sueños y esperanza. Posteriormente, en 1997, se realizaría una película, dirigida por Robert Zemeckis y protagonizada por Jodie Foster y Matthew McConaughey.  Una buena producción, también es cierto que adaptaba la historia de forma bastante libre y "traicionaba" algunos conceptos.

La novela sería publicada en 1985, pero 2 años antes de su lanzamiento, cuando posiblemente estaba escribiendo ya sus últimas páginas y dando algunos retoques, empezó a considerar la idea de extender la historia al mundo del ocio electrónico, que después de una profunda crisis estaba ya dando los primeros pasos para resurgir y convertirse en lo que es hoy día con la llegada de la Nintendo Entertainment System. Aunque posiblemente las plataformas de Atari y Commodore habrían sido las que lo habrían recibido. O no. Eso nunca lo sabremos.

"La pregunta es cómo diseñar un videojuego doméstico que sea capaz de enseñar los valores de la astronomía en un contexto tan emocionante como lo hacen la mayoría de los videojuegos violentos". Así comenzaba este documento inédito sobre el interés de Sagan en este terreno, desconocido hasta ahora.¿En que abría consistido este videojuego? Podemos imaginar que en desplazarnos por entorno en 3 dimensiones, recreando la posición real de miles de estrellas cercanas, además de objetos celestes como la Nebulosa de Orión, entre otros, para resolver puzzles o deducir pistas para encontrar algo, en lo que no dejaría de ser la excusa para un viaje didáctico, aprendiendo muchos de los conceptos que intentó transmitir en sus libros y programas televisivos. "Si el objetivo depende del reconocimiento de patrones, la geografía general de la Vía Láctea podría enseñarse de manera sencilla. El tamaño de la galaxia hace que sea un escenario natural para un juego en el que algo se pierde y debe ser encontrado".

La idea no llegó más lejos, quedándose en un esquemático documento que nos insinúa , más que enseña, lo que podría haber sido Contact, el videojuego. Posiblemente no habría triunfado, más allá de los pocos que seguramente nos habríamos sentidos atraídos por el nombre, tanto por las limitaciones gráficas de una época tan temprana de la industria del videojuego, que habría hecho dificil plasmar una idea de tal calibre, como por la ineludible realidad que el público objetivo de estas plataformas, al menos en esa época, eran básicamente infantil. Incluso hoy, superadas estas barreras, en que los videojuegos se ven como un campo de entretenimiento general y abierto a todas las edades, sigue resultando complicado imaginar haciéndose un hueco realmente digno viendo lo que suele triunfar, aunque seguramente en el campo visualmente habría estado mucho más cerca de lo que Sagan había imaginado.

En todo caso es una lástima no haber podido verlo convertido en realidad. Con gusto lo habría jugado. Porque Sagan es mucho Sagan.

El documento ahora publicado, en que Sagan describía de forma resumida su concepto de lo que podría ser un videojuego de Contact. Aunque no llegó más lejos se puede tener una idea general, leyendo estas pocas líneas, lo que podría haber sido.

La novela de Contact, y la película que se hizo de ella varias décadas después, con no pocos cambios y cambios de concepto. El videojuego, que se habría desarrollado junto con esta primera, se habría unido como un auténtico "universo expandido" de la primera y única incursión de Sagan en el terreno de la ciencia ficción. 

Contact, el videojuego que diseñó Carl Sagan y nunca vio la luz

domingo, noviembre 29, 2015

Post Vintage (161): Un punto de luz llamado hogar

Curiosity fotografía a La Tierra en el amanecer marciano.

"Mira de nuevo en ese punto. Eso es aquí. Eso es nuestra casa. Esos somos nosotros". Carl Sagan escribía estas palabras para referirse a las imágenes enviadas por la Voyager 1 a principios de 1990, cuando ya más allá de la órbita de Neptuno miró hacia atrás y realizó un "retrato en familia" del Sistema Solar, incluido nuestro planeta, en ese momento ya un simple punto perdido en la inmensidad. Es lo que se conoció desde entonces como el Pale Blue Dot, el Punto Azul Pálido, quizás una de las imágenes más famosas de la historia espacial.

El mensaje implícito, pero, es válido para todas y cada una de las imágenes que diversas sondas interplanetarias han tomado de nuestro hogar desde la distancia a lo largo de los años. La Tierra nos llama una y otra vez, sea donde sea que nos encontremos, y siempre, como si cada una de ellas fuera la primera, nos sigue emocionando cada vez que conseguimos verla, ahí perdida en la oscuridad. Curiosity, por supuesto, no podría ser la excepción, y el reencuentro con su mundo de origen tuvo lugar el pasado 31 de Enero de 2014.

Brillando en las primeras luces de amanecer, de forma semejante a como lo hace en ocasiones Venus en los cielos terrestres, La Tierra aparece como una brillante "estrella matutina" sobre las lejanas paredes del cráter Gale. Aunque imágenes con mayor resolución aún deben ser publicadas en el futuro, las disponibles son ya lo suficientemente hermosas para recordar las palabras de Sagan. Desde ese punto de luz inició su viaje, desde ese punto de luz todos nosotros seguimos su extraordinario viaje. Un punto de luz llamado hogar.

En una ocasión Spirit fotografió La Tierra, en una imagen donde un inspirador "You are here" marcaba el lugar de procedencia y allí donde estábamos todos nosotros. Ahora Curiosity ya tiene la suya. Y seguramente no será la última.

La Tierra y la Luna en el cielo del planeta rojo.

Como se realizó esta secuencia, que combina imágenes de las Mastcam-100 y  Mastcam-34.

La posición relativa de ambos mundos, en ese momento separados por 159 millones de Kilómetros. 

Looking Backward: Curiosity gazes upon the setting Earth

NASA Mars Rover Curiosity Sees 'Evening Star' Earth

sábado, noviembre 28, 2015

Cuando el mundo se mueve

Haciendo visible la rotación de nuestro planeta.

Durante la mayor parte de nuestra historia hemos tenido una visión geocéntrica de nuestra realidad. Y no es extraño, ya que ante nuestros ojos la Bóveda Celeste, toda ella, con el Sol, la Luna, los planetas y las estrellas, parece girar a nuestro alrededor. Por ello fue muy complicado (y en algunos casos, aún se sigue creyendo) dejar atrás lo que no era más que una ilusión, fruto de estar moviéndonos junto con el conjunto del planeta, y por ello junto con los puntos de referencia más cercanos, completando así el engaño a nuestra compleja, pero al mismo tiempo facilmente engañable mente. Es como si estuviéramos montados en un tren en marcha y miráramos el paisaje que pasa ante nuestros ojos, aunque en este caso siempre podemos asomarnos al exterior para comprobar que, efectivamente, somos nosotros los que nos desplazamos, no el paisaje. En el caso la Tierra escapar a este ilusión es más complicado.

A partir de un espectacular Time-Lapse realizado por Stephane Guisard y Jose Francisco Salgado, desde el European Southern Observatory, en Chile, invierte esta situación, manteniendo el firmamento como punto de referencia estático y dejando que, en su lugar, sea el propio observatorio, la montaña sobre la que se encuentra y todo el planeta en si el que gire sobre si mismo. Como en realidad ocurre. Y la ilusión se rompe. De golpe sentimos que hemos abierto la ventanillas de nuestro mundo y mirado hacia el exterior. 

Puede parecer simple, evidente y lógico, pero en realidad es una sensación tan reciente como la misma astronomía, y defenderla, hasta hace varios siglos, un verdadero acto de valentía.

La rotación de la Tierra, extraída a partir de un ingenioso cambio de papeles.

El Time-Lapse original, realizado desde el European Southern Observatory.

Stabilized time-lapse of the night sky clearly shows how Earth rotates

viernes, noviembre 27, 2015

La muerte más bella

Marte tendrá su propio sistema de anillos cuando finalmente destruya a la mayor de sus lunas.

Hablar de Fobos es hablar de un cuerpo condenado, destinado a desvanecerse en la nada en unas pocas  decenas de millones de años. Desde nuestra perspectiva eso es una eternidad, y es posible que en el futuro aterrizamos en el, se convierta en una especie de puesto avanzado en la colonización de Marte, y acompañe a sus primeros habitantes, así como para a innumerables generaciones que les seguirán  en las oscuras noches del planeta rojo, pero a escalas cósmica eso es mañana mismo. Su larga vida, quizás tan larga como el propio Sistema Solar, afronta sus últimos minutos de vida en el reloj del Universo.

Actualmente ya es como el satélite más cercano a su planeta conocido, y es una distancia que las fuerzas de marea de Marte, que lo van frenando lentamente, no hacen sino reducir día a día. Y con ello aumentan las tensiones estructurales de Fobos, que tarde o temperado llevarán a su fragmentación final. Las señales de que esto ya esta ocurriendo son visibles en su rostro. De 20 a 40 millones de años es el tiempo que le queda, mucho o poco, según la perspectiva, humana o cósmica, que utilicemos. Pero ocurrirá y ya nada puede impedirlo. Por tanto la siguiente pregunta es como será este final realmente.¿Se precipitará en la atmósfera, generando una espectacular tormenta de fuego? O quizás será, por el contrario, algo más lento y hermoso, formando un maravilloso anillo alrededor de Marte? La posible respuesta, según un nuevo estudio realizado por la UC Berkeley en Nature Geoscience, está a medio camino entre ambos extremos.

Según los modelos manejados por el equipo de Ben Black, que lideró este nuevo estudio, una vez la resistencia de Fobos se venga abajo y se fragmente, los trozos de mayor tamaño podrían ser capaces de resistir las mareas gravitatorias de Marte, para seguir cayendo en espiral y finalmente impactar contra la superficie en trayectorias oblicuas y a baja velocidad, colisiones previstas en la zona ecuatorial, que concertaría así toda la potencial amenaza de cataclismo.


Los restos de lo que una vez fue Fobos, la mayor parte en realidad, tendrá un destino mucho más hermoso: Se convertirá en un sistema de anillos, haciendo que Marte ingrese en la misma y selecta familia de Saturno, Júpiter, Urano y Neptuno. Su esperanza de vida, pero, lo marcará en momento en que Fobos sucumba a su destino. Cuando antes suceda, más tiempo permanecerá,

"Si la luna se fragmenta en unos 680 Kilómetros por encima de la superficie, se formará un anillo muy estrecho, con densidades parecidas a la de uno de los anillos más masivas de Saturno", explica Tushar Mittal, uno de los autores de este estudio, en un comunicado. "Con el tiempo se extendería y se haría más amplia, llegando finalmente a la parte superior de la atmósfera marciana en unos pocos millones de años, momento en que empezaría a perder material" por la fricción atmosférica. Si por el contrario la resistencia de Fobos colapsa más lejos de Marte, el anillo podría persistir por hasta 100 millones de años. 

En ningún caso sería un un gran espectáculo visto desde la Tierra, como ocurre con los anillos de Saturno, ya que estos últimos están compuestos sobretodo de hielo de agua, mientras que Fobos se compone principalmente de rocas ricas en carbono. Pero para cualquier que viva en Marte decenas de millones de años a partir de ahora, los anillos serán un hermoso elemento permanente en el cielo. Que mejor manera podría haber para este incansable viajero que poner punto final a su larga  vida con un último y maravilloso espectáculo, que haga que la gente que un día pueble el planeta rojo sepa que un día existió cuando mucho más allá de su propio tiempo, cuando ya se haya desvanecido en la nada, dejando trás de si un hermoso rastro en el cielo.

Fobos, (del griego Φóβoς, "miedo"), mide 26,8 × 21 × 18,4 Km y es la mayor de las lunas de Marte, además de ser la que se desplaza más cerca de su planeta, apenas a 6.000 Km por encima de la superficie. Una proximidad que a la larga será fatal para ella.

Júpiter a contraluz. Aunque solemos relacionar anillos con Saturno, todos los gigantes del Sistema Solar exterior, además de al menos un asteroide, tienen sistemas de anillos, aunque todos ellos oscuros por el material que los forma. Los de Marte seguramente serán parecidos. 

The Amazingly Creepy Way Mars Will Kill Its Moon

jueves, noviembre 26, 2015

Algo pasa con KIC 8462852

Enjambres de cometas, la explicación más probable a las repentinas caídas de su luminosidad en 2011 y 2013.

No tiene un nombre sencillo de recordar, pero recientemente se convirtió en la estrella más famosa de la red, todo gracias a su comportamiento inexplicable y extraño. La misión Kepler  había supervisado la estrella durante 4 años años de forma continua, como parte de su campaña para localizar posible nuevos exoplanetas. Sin embargo lo que detectó fueron dos incidentes inusuales, en 2011 y 2013, cuando su luz se vio atenuado de manera dramática, de una forma nunca antes vista. Algo había pasado por delante de la estrella y bloqueado su luz, pero ¿qué?

Como sucede siempre que se anuncian descubrimientos fuera de lo común, las ideas volaron casi tan alto como la propia estrella (situada a 1.500 año luz) y no pocos se apuntaron a la posibilidad de que estábamos viendo megaestructuras alienigenas en órbita alrededor de ella, o incluso una de las teorizadas Esfera de Dyson, hasta el punto de que SETI decidió centrar su atención en ella, buscando posibles emisiones de origen inteligente, aunque de momento sin resultado. Sobra decir que los más entusiastas de estos temas, independientemente de las evidencias y estudios, lo han dado por hecho y poco importa lo que se diga. Pero los astrónomos parecen inclinarse de forma mayoritaria que estamos posiblemente ante un fenómeno natural, extraordinario eso si, pero natural.

La primera opción, y la más probable según los científicos, es la del enjambre de cometas, como parece respaldar un nuevo estudio realizado a partir de datos del Telescopio Espacial Spitzer, capaz de observar el Universo en el espectro infrarrojo. Estos han permitido descartar otras opciones manejadas, como un impacto planetario o una colisión entre asteroides, ya que habrían dejado tras de si un exceso de luz infrarroja alrededor de KIC 8462852, fruto de la nube polvo caliente que se generaría. Ni el ni WISE, también centrado en esta frecuencia del espectro, han podido detectar nada parecido.

Esto favorece la idea de que fríos cometas son responsables de lo ocurrido. Es posible, según los astrónomos, que una familia de cometas este viajando en una órbita muy larga y excéntrica alrededor de la estrella. A la cabeza de la "manada" habría un gran cometa, que habría sido responsable de la caída de luminosidad de la estrella en 2011 al pasar entre ella y la Tierra desde nuestra perspectiva. Más tarde, en 2013, el resto de la familia, una banda de fragmentos de tamaños diversos, habría pasado hecho lo mismo y de nuevo bloqueado su luz. En el Sistema Solar hemos visto ejemplos, aunque a mucha menos escala, de algo así, con el cometa Shoemaker-Levy, que se fragmento en una procesión de pequeños cuerpos, todos siguiendo el trayecto del original, en su camino hacia la destrucción.

Spitzer observó la estrella en 2015, por lo que estos cometas se encontrarían ya más lejos, después de haber continuado en su largo viaje, no dejando ninguna firmas infrarroja que pueda ser detectadas. Según Marengo, líder de este estudio, se necesitan más observaciones para ayudar a resolver el caso de KIC 8462852. "Esta es una estrella muy extraña. Me recuerda a cuando  descubrimos los pulsars. Estos estaban emitiendo señales extrañas que nadie había visto antes, y el primero que se descubrió fue nombrado LGM-1, de Little Green Me". Al final, las señales de LGM-1 resultaron ser un fenómeno natural. "Puede que no sepamos todavía lo que está pasando alrededor de esta estrella, pero eso es lo que la hace tan interesante".

Nada de esto descarta totalmente otras posibilidades, incluidas las soñadas estructuras alienígenas imaginadas por las mentes más desatadas y soñadoras, ya que en el fondo seguimos sin saber a ciencia cierta que ocurre en KIC 8462852. Pero la respuesta más probable quizás es menos transcendental, aunque no por ello menos espectacular. 
 
KIC 8462852, una estrella llena de secretos.

Strange Star Likely Swarmed by Comets

miércoles, noviembre 25, 2015

El vuelo de Shepard

Blue Origin logra el primer regreso y aterrizaje controlado de un cohete.

Esta aún lejos de lo que busca lograr Space X, lanzamientos con capacidad de poner cargamentos en órbita y cuyo cohete impulsor logre, una vez dando el impulso suficiente, regresar a la Tierra y aterrizar de forma vertical y controlada en el mismo lugar de donde partió, un objetivo ambicioso que aunque estuvo cerca de lograrse en varias ocasiones, aún se resiste a la empresa de Elon Musk. Sin embargo, aunque "solo" fuera un vuelo hasta la frontera misma del espacio (por encima de los 100 Kilómetros de altura), que requiere solo una mínima parte de la energía necesaria para hacer un vuelo orbital, para regresar rápidamente hacia la superficie, lo cierto es que el merito es tremendo, y para la empresa de Jeff Bezos, Blue Origin, quedará en la historia como los primeros que lo consiguieron.

En este histórico ensayo, el cohete New Shepard se elevó hasta los 100,5 kilómetros de altura con una velocidad Mach 3,72, para luego regresar a la Tierra. No lo hizo fuera de control, como ocurre con aquellos no reutilizables, o como en el caso de los cohetes externos de los ya retirados Space Shuttle, con paracaídas, sino de forma controlada, primero reduciendo la velocidad  después dirigiéndose hacia la zona elegida mediante unas aletas externas y finalmente, ya en la vertical del punto de aterrizaje, el encendido del cohete cuando se encontraba a 1.500 metros del suelo frenó definitivamente al vehículo hasta tocar la superficie a solo 4 Kilómetros/Hora. Solo el leve daño registrado en el metal de su base muestra que aún quedan cosas que mejorar, pero a todos los efectos

La capacidad de reutilizar un mismo cohete en un número considerable de vuelos se considera un elemento clave para el desarrollo de una carrera espacial privada, ya que disponer de cohetes que regresaran intactos a la superficie y listas para ser lanzados de nuevo en poco tiempo implicaría una rebaja drástica de los costes de cada vuelo, abriendo así el acceso las puertas del espacio de forma definitiva, ofreciendo servicios a precios mucho más bajos que los actuales, haciendo posible que se convirtiera así en un negocio plenamente rentable para estas compañías.

No fue ese el único éxito, ya que la cápsula no tripulada New Shepard, con la que Blue Origin quiere entrar en el campo del turismo espacial y los vuelos orbitales (en este caso con otro modelo mayor conocido con el nombre en clave de "Very Big Brother") aterrizó también de una pieza, en este caso con el más tradicional sistema con paracaídas. Sin lugar a dudas un día importante para esta compañía, que está desarrollando su propio plan de lanzaderas y vehículos orbitales rodado de cierto secretismo y lejos de las luces mediáticas en las que se mueve Space X. Y aunque aún lejos de poder dar el salto definitivo y ponerse a su misma altura, estos vuelos nos demuestran que también ellos van en serio.

El vuelo y regreso del cohete New Shepard.

El cohete, fotografiado después del aterrizaje. Solo la parte inferior, que aparece dañada , muestra que aún queda terreno para mejorar.

La cápsula tomando tierra poco después, completando así un viaje suborbital sin ningún fallo.
Elon Musk felicitó a Blue Origin por su logro, pero sin dejar de matizarlo. Seguramente no le hizo mucha gracia que la competencia lo adelante en algo, aunque no por ello deja de tener razón en que, efectivamente, una cosa es el espacio y otra la órbita.


El proyecto New Shepard, con el que Bule Origen quiere entrar en el negocio espacial.

Blue Origin Makes Historic Reusable Rocket Landing in Epic Test Flight

martes, noviembre 24, 2015

Los días de Japón

Las sondas japoneses Akatsuki, PROCYON Y Hayabusa 2 serán las protagonistas espaciales durante los primeros días de Diciembre.

La NASA tiene un protagonismo central en el panorama de la exploración interplanetaria, tanto por sus misiones en activo como las que deberán venir en el futuro, a pesar del pequeño bache que la política seguida por la actual administración de la Casa Blanca en este terreno a representado para su programa planetario. Pero la JAXA, la agencia espacial japonesa, busca también un lugar entre las estrellas, como confirmó el reciente lanzamiento de la Hayabusa 2 y los planes que están manejando para La Luna y Marte. Y los días 3 y 7 de Diciembre, especialmente este último, están marcados en su calendario de eventos, ya que 2 de sus enviadas interplanetarias afrontan sendos momentos claves.

La primera de ellas será la PROCYO, poco conocida por el gran público al ser una pequeña sonda experimental que fue lanzada junto con la Hayabusa 2, y como era esperable, su existencia pasó casi inadvertida ante el fulgor mediático de la última. Con la meta última de sobrevolar el asteroide 2000 DP107, un fallo terminal en su sistema de impulsión iónica impidió realizar las maniobras necesarias para ello, pero el resto de sistemas e instrumentos están funcionando a pleno rendimiento, por lo que su verdadero objetivo, ofrecer experiencia de vuelo de cara a futuras misiones interplanetarias, sigue adelante. Y este 3 de Diciembre, a pesar del fallo de la impulsión, sobrevolará la Tierra tal y como estaba previsto. Sus pequeñas cámaras nos ofrecerán nuevas vistas de nuestro planeta desde la distancia. Y sus ingenieros y técnicos de vuelo, de la JAXA y la Universidad de Tokyo, tendrán con gracias a ella una oportunidad de aprendizaje sin duda valiosa.

La segunda marca el gran momento, el que decidirá si la Akastuki, que en 2010 fracasó en su intento de entrar en órbita alrededor de Venus, es capaz ahora, después de 5 años de viaje alrededor del Sol para "atrapar" de nuevo al planeta, es capaz de aprovechar esta 2ª oportunidad que le ofrece el destino, algo muy poco habitual, por no decir inédito, en la historia de la carrera espacial.

No será sencillo. Con su sistema de impulsión principal fuera de servicio (ciertamente es un aspecto técnico en que la JAXA no parece tener suerte, como le ocurrió también con la fallida Nozomi a Marte), los ingenieros han dando forma a un complejo y arriesgado plan de contingencia que implicará usar los pequeños impulsores secundarios, diseñados para ajustar la dirección de la sonda, para frenar a la sonda y lograr que Venus la capture. Sobre decir que no fueron diseñados para algo así, y que se trata de una improvisación, algo en que los japoneses han demostrado ser bastante hábiles, como lo demuestra el que consiguiera hacer regresar a la primera Hayabusa a la Tierra, después de que casi todo lo que podía salir mal saliera mal. Solo queda desearles la mayor de las suertes, y que después del final de la Venus Express, y aunque sea con media décadas de retraso, regresemos a este planeta.

Y por si todo esto fuera poco, el 3 de Diciembre, el mismo día que PROCYO sobrevuele La Tierra, Hayabusa 2 también pasará cerca de ella, para usar su tirón gravitatorio para ajustar velocidad y trayectoria hacia su objetivo final, el asteroide Ryugu.

Los próximos días estas sondas de JAXA serán las protagonistas de las noticias interplanetarias. Aunque solo sea por unos días, la NASA quedará en segundo plano.
 
PROCYON, la pequeña sonda experimental japonesa. Su igualmente pequeño sistema de impulsión iónica, que debería haberle permitido ajustar su trayectoria para aproximarse al asteroide 2000 DP107, pero aunque este dejó de funcionar el resto del vehículo sigue en perfecto estado y sobrevolará nuestro planeta, ofreciendo imágenes y, sobretodo, experiencia a la JAXA en este tipo de vuelos.

Imágenes de la Tierra tomadas por la cámara de PROCYON.

Akatsuki debería haber entrado en órbita alrededor de Venus en 2012. Un fallo en su sistema de impulsión, que debería haberla frenado dejó de funcionar en el momento más crítico.

Después de un viaje de 5 años alrededor del Sol, persiguiendo a Venus mientras que mantenía en hibernación para limitar al máximo el desgaste de los instrumentos y equipos, Akatsuki está a punto de atraparlo. Una segunda y última oportunidad.
Un mensaje de apoyo y ánimo para Akatuski y su equipo por parte del astronauta de la JAXA Kimiya Yui, actualmente en la ISS.

Hayabusa 2 también tomará parte de esta fiesta de la exploración interplanetaria de Japón, pasando cerca de La Tierra el próximo 3 de Diciembre.

Two JAXA mission updates: Akatsuki Venus orbit entry and PROCYON Earth flyby coming up!

Hayabusa2 set for Earth swing-by! Your support messages welcomed.

lunes, noviembre 23, 2015

Un momento de creación

Captado por primera vez en imágenes el nacimiento de un planeta.

Las estrellas jóvenes se ven rodeadas por un disco de materia, lo que queda de la nube de gas y polvo que la formó, inicialmente extendida en todas direcciones pero que terminan adquiriendo está forma al rotar rápidamente a su alrededor. Se les llama discos protoplanetarios porque de ellos pueden nacer, por acrecimiento, infinidad de minúsculos mundos, planetesimales que con el tiempo van atrapando más y más materia, creciendo a medida van limpiando la zona por la que orbitan. Al final los mayores (o los que tengan más suerte) sobrevivirán al caos inicial para dar lugar a un sistema planetario estable. Es una visión extremadamente básica, ya que existen otros factores algunos de los cuales aún no entendemos del todo, pero así podemos resumir como imaginamos que pudo formarse en Sistema Solar, y por extensión, los más de 2.000 exoplanetas conocidos.

Los indicios claros, pero indirectos, de este proceso se llevan observando desde el descubrimiento de los primeros mundos en otras estrellas, grandes vacíos en discos protoplanetarios que señalaban la presencia de jóvenes mundos que habían devorado toda la materia existente en su zona de influencia. Quedaba verlo directamente, algo comprensiblemente dificil por las distancia (solo tenemos imágenes de 10 de los más de 2000 exoplanetas confirmados). Ahora parece que esto se acaba de lograr, un nuevo salto adelante en nuestra compresión de Universo.

"Nadie había podido detectar con éxito e inequívocamente un planeta que se está formando. Siempre ha habido explicaciones alternativas, pero en este caso hemos tomado una foto directa, y es difícil de refutar" explica Kate Follette, coautora del estudio, que han liderado las universidades de Arizona y Stanford. Su objetivo fue una estrella conocida como LkCa 15, situada a unos 450 años luz de la Tierra. Un astro muy joven, rodado de un gran disco protoplanetario, en el interior del cual existe enorme vacío, del tamaño del Sistema Solar. La explicación más sólida para ello es la presencia de planetas jóvenes, o directamente en pleno proceso de nacimiento, y por eso fue la escogida para esta campaña de observación, para la cual se utilizaron los telescopios Magallanes, en Chile, y el Large Binocular Telescope, en Arizona.

Lo que buscaban era calor, ya que los objetos cósmicos se están formado generan y desprenden mucho calor. Y debido a que lo hacen en gran parte a partir del Hidrógeno, resplandecen con un color rojo oscuro, que los astrónomos se refieren como emisiones H-alfa, una determinada longitud de onda de la luz."Es como un letrero de neón, la manera con que el neón se ilumina cuando se energiza", explica Laird Close, profesor de astronomía. Pero es todo un reto verlo separado del resplandor general de una estrella también naciente."Una luz rojiza que es emitida tanto por el planeta y la estrella  que sean sometidos al mismo proceso de crecimiento", concluye Follette. "Hemos sido capaces de separar la tenue luz del planeta  de la luz de la estrella mucho más brillante, y ver que ambos están creciendo y brillando en esta muy distinto tono de rojo". 

5 años de observación y la aplicación de las tecnologías más avanzadas hicieron posible ahora lograr hacer visible este momento de creación, cuando un nuevo mundo está dando los primeros pasos de su larga vida, como los pudo dar la Tierra hace ya más de 4000 millones de años. Una tenue luz que nos recuerda nuestros propios orígenes. 
 
Una imagen compuesta de LkCa15, combinando los datos de Magallanes, en azul, y los datos de LBT, en verde y rojo. El protoplaneta, conocido como LkCa 15 b, resplandece aquí a temperatura estimadas de unos 10.000 K, y se puede ver su desplazamiento a lo largo de 5 años de observación.

La luz de un nuevo mundo. 

Los astrónomos asisten por primera vez en la historia al nacimiento de un planeta

Researchers Capture First Photo of Planet in the Making 

Accreting protoplanets in the LkCa 15 transition disk

domingo, noviembre 22, 2015

Post Vintage (160): El reino fluvial

Cassini revela la existencia del "Nilo Titánico", un río de 400 kilómetros de longitud.

Estamos viviendo los últimos años de este misión histórica, de la cual podemos estar seguros de 2 cosa: No dejará de hacer nuevos descubrimientos hasta el último día y que, cuando las cenizas de lo que un día fue una de las sondas de exploración más exitosas de todos los tiempos se difuminen en la atmósfera del planeta, tendremos la sensación de que, pese a todo los esfuerzos, muchas maravillas habrán quedado son desvelar, a la espera que algún día, en un futuro que por ahora solo existe en nuestros sueños, alguien venga a tomar el relevo.

Y es que Cassini, que lleva 7 años de intenso trabajo nos sorprende nuevamente, y una vez más con Titán como protagonista. En lo que fue su 87º sobrevuelo de esta luna de los enigmas, las señales de radar con las cuales la sonda puede estudiar la superficie a pesar de la densa niebla que cubre por completo su rostro, detectaron algo que hasta ahora no se había hecho (solo se pueden estudiar zonas concretas en cada paso) y que sin duda hace que Titán adquiera un tono aún más terrestre de lo que ya tenía, recordando nuevamente que estamos, pese a todas, ante el mundo más parecido a La Tierra del Sistema Solar, aún más que Marte.

Un enorme río de cerca de 400 Kilómetros de longitud, el mayor visto hasta ahora y apodado por el equipo de Cassini como el "Nilo titánico" por su parecido al Nilo terrestre, en especial porque excepto por algunos meandros puntuales, es relativamente rectilíneo en camino hacia el Norte, hasta que desemboca en el Ligeia Mare, el segundo mayor mar después del Kraken Mare, lo que quizás indica que está siguiendo una falla del terreno.

Pero lo más importante, no estamos hablando de un cauce seco, ya que la completa oscuridad que podemos apreciar en las imágenes por radar indican una superficie extremadamente lisa. Justo al contrario, estaría actualmente llena de líquido, posiblemente una mezcla de metano-etano, un flujo alimentado por las lluvias de Metano que forman parte del complejo ciclo hidrológico de Titán.

Esta versión exótica del Nilo se añade a muchos otros descubrimientos recientes que están dando forma a un mundo con un clima extremadamente activo. Así, ahora sabemos que hay lagos también en el Polo Sur (Ontario Lacus) e incluso en regiones ecuatoriales, además de confirmarse que se producen lluvias torrenciales de Metano en latitudes medias y no solo en las polares, como se creía inicialmente. Todo esto, junto con las evidencias de un ciclo de avance y retroceso de los lagos según la estación y el descubrimiento de otros sistemas fluviales, como Elivagar Flumina han ido dando forma a un Titán extraordinario que este nuevo y caudaloso hallazgo solo hace fortalecer, al mismo ritmo que nuestra admiración y deseo de que algún día podamos explorarlo como se merece.

El día que Cassini deje de existir la echaremos mucho de menos. Como no hacerlo..

El "Nilo Titánico", que desde su cabecera avanza hasta desembocar en el Ligeia Mare. La oscuridad del cauce ante el radar, parecido al del propio mar, revela una superficie muy lisa que encaja con la presencia de líquido.

El Nilo terrestre, visto en infrarrojo por el transbordador Columbia (arriba) y en radar por el Endeavour. Los parecidos con lo visto ahora en Titán es evidente.

Ligeia Mare, el segundo mayor de Titán...se aprecia la amplia red fluvial que lo alimenta a la que ahora se añade este nuevo y enorme río ahora descubierto.

Un reflejo del lejano Sol, posiblemente sobre las "aguas" de Ligeia Mare.

Los mares o lagos que actualmente  se extienden por las latitudes del Norte de Titán.

Un mundo extraordinario bajo la luz de Saturno y el lejano Sol.

Allí lejos, más allá de nuestro reino de luz solar, se esconde un lugar más parecido a La Tierra de lo que nadie podría imaginar.

El río Nilo de Titán

Cassini Spots Mini Nile River on Saturn Moon

sábado, noviembre 21, 2015

Un día en la vida de Plutón

Observando una rotación completa.

Este pequeño mundo extraordinario ya queda lejos en el espacio y en el tiempo, pero la lenta, muy lenta descarga de los datos acumulados durante su fugaz encuentro, sumado el tiempo necesario para su estudio y publicación, hace que sigamos viviendo la llegada de nuevos noticias como si la New Horizons, en lugar de un sobrevuelo puntual, hubiera protagonizado una entrada en órbita y estuviera ahora trabajando de forma permanente en el sistema plutoniano. Y viendo lo que estamos viendo, ciertamente muchos habríamos deseado que así fuera.

Lo más recientemente publicado por el equipo de la New Horizons nos lleva atrás en el tiempo, hasta el 7 de Julio, a una semana y 8 millones de Kilómetros de Plutón, y desde ahí, en una serie de fotografías tomadas por LORRI, aproximándonos hasta horas antes del encuentro y solo 645.000 Kilómetros. Un conjunto que adquiere sentido si tenemos en cuenta que su periodo de rotación  es de 6,4 días terrestres. Lo que estamos viendo aquí, por tanto, es un día completo en este planeta enano.

Las imágenes, como es lógico imaginar, tiene una resolución muy diferente, desde apenas capaz de dejar ver alguna de las formaciones geológicas de la cara "opuesta" a la sonda, aquella que quedó al otro lado del planeta cuando esta alcanzó el punto de máxima aproximación, hasta la extremadamente detallada vista de Sputnik Planum, el brillante y extrañamente joven corazón de Plutón. Sobra decir que esto último no fue casual: El lanzamiento, trayectoria y velocidad fue ajustada para que el hemisferio del encuentro durante el paso del 14 de Julio fuera precisamente este, el lugar donde telescopios como el Hubble había detectado las variaciones de luminosidad más intensas. Poco, muy poco se suele dejar al azar cuando hablamos de la exploración interplanetaria.

Viendo, o mejor dicho, intuyendo lo que las imágenes tomadas a más gran distancia del otro lado de Plutón, podemos estar seguros de que habría sido también un escenario maravilloso, pero una sonda de sobrevuelo no puede estar en todos lados al mismo tiempo y era necesario elegir. Y el resultado final no admite queja, ya que Sputnik Planum es una de las regiones más extrañas y científicamente desafiantes del Sistema Solar. Quizás algún día podamos volver y completar lo que la New Horizons comenzó.

Pero eso ya son sueños de un futuro lejano. El presente sigue siendo lo que poco a poco nos va llegando,nuevas imágenes que aún nos deben deparar cosas nuevas, como las que se tomaron del hemisferio sumergido en la oscuridad del Invierno, y que la sonda fotografió durante el trayecto de salida intentando sacar partido de la luz solar reflejada por Caronte. En unas semanas sabremos si consiguió captar alguna cosa o esa zona de Plutón seguirá tan desconocida como lo era el resto del planeta antes de su llegada. El pequeño mundo de las maravillas aún nos reserva muchas maravillas, que esperan en los bancos de memoria de la New Horizons su momento de viajar a la Tierra.

También el día de Caronte fue captado por la New Horizons durante la fase final de aproximación. Este dura lo mismo que el de Plutón, ya que está atada gravitatoriamente a este último hasta el punto de que muestra siempre la misma cara y gira a su alrededor lo mismo que este tarda en completar su día, por lo que alguien situado en la superficie plutoniana siempre vería a Caronte en el mismo punto del firmamento.

Plutón visto en falso color para resaltar las diferencias en la composición de la superficie. Aunque solo pudimos ver en todo su esplendor este hemisferio, el resultado fue maravilloso, al mismo tiempo que genera una sensación de tristeza por lo que pudo ser una misión orbital y no fue.

Las montañas de Plutón a la luz del atardecer, en una de las últimas recibidas. Los archivos de memoria de la New Horizons aún esconden muchas maravillas.

New Horizons mantuvo a Plutón y Caronte "bajo vigilancia" desde días antes del encuentro, lo que le permitió observar una rotación completa de Plutón y Caronte, levantando un mapa global del hemisferio iluminado por el Sol, con una resolución variable pero extremadamente valioso para los astrónomos. 

A Day on Pluto, a Day on Charon

viernes, noviembre 20, 2015

Allí donde nacen los monstruos

El telescopio VISTA nos desvela cuando se formaron las primeras galaxias masivas, mucho antes de lo teorizado por los modelos actuales.

Para poder a prueba las teorías actuales sobre formación y evolución de las galaxias, uno de los sistemas más simples pero al mismo tiempo afectivo es acotar una zona de la Bóveda Celeste y contar cuantas podemos detectar. Sencillo con aquellas más cercanas, pero que se va complicando a medida que retrocedemos en el espacio, y por eso mismo, dada que la velocidad de la luz es finita, en el tiempo. Y se complica aún más por el hecho de que las galaxias más brillantes y más fáciles de observar (las más masivas, como la Vía Láctea y otras aún más colosales) son más escasas cuanto más penetran los astrónomos en el pasado, mientras que las más menos brillantes (pero más numerosas) son aún más difíciles de detectar.

Y eso quiere decir que allí lejos, en lo que para nosotros son las fronteras del espacio y del tiempo, puede haber mucho más de lo que creíamos, y con ello obligar a replantear algunos aspectos de lo que creíamos saber.

Así nos lo recuerda un equipo de astrónomos dirigido por Karina Caputi, del Instituto de Astronomía de Kapteyn, en la Universidad de Groninga, que ha sacado a la luz la existencia de muchas galaxias lejanas que habían escapado de los escrutinios anteriores, utilizando para ellos imágenes del sondeo UltraVISTA para rastrear una zona del cielo concreta desde 2009, en longitudes de onda del infrarrojo cercano y hacer un censo de galaxias débiles en una época en la que la edad del universo estaba entre los 750 y los 2.100 millones de años. Todo ello combinado con las realizadas de esa región por el Telescopio Espacial Spitzer.

"Descubrimos 574 galaxias masivas nuevas, la muestra más grande de este tipo de galaxias ocultas del Universo temprano jamás reunida", explica Karina. "Estudiarlas nos permitirá responder a una pregunta simple pero importante:¿cuando aparecieron las primeras galaxias masivas?". Gran parte de las galaxias masivas que vemos ahora a nuestro alrededor, en el universo cercano, ya se habían formaron sólo 3.000 millones años después del Big Bang. Pero ahora la fecha de origen quizás deba retrasarse aún más, desafiando los modelos establecidos, gracias a esta amplia campaña de exploración profunda, que sacó a la luz estos colosos, que están oscurecidos por el polvo y son extremadamente distantes.

Y es que este estudio en profundidad, además de que las galaxias masivas eran más abundantes de lo que se había pensado, demuestras que ya estaban presentes cuando el Universo tenía entre 1.000 y 1.500 millones años. Estos contradice los modelos actuales de evolución galáctica, que no predicen la existencia de este tipo de monstruosas galaxias en esas épocas tempranas. Para complicar aún más las cosas, si las galaxias masivas del universo temprano contienen más polvo que el predicho por los astrónomos, entonces ni siquiera UltraVISTA sería capaz de detectarlas. Si este es el caso, las teorías actuales sobre cómo se formaron puede requerir de una revisión completa. "No encontramos evidencia de la presencia de estas galaxias masivas antes de alrededor de 1.000 millones de años después del Big Bang, así que estamos seguros de que las primeras debieron formarse en ese momento", concluye Henry Joy McCracken, coautor del artículo.

Un reino lejano en el espacio y el tiempo, donde nacieron monstruos que desafían las reglas del juego que creíamos ya tan establecidas. El radiotelescopio ALMA, así como los futuros observatorios que están por llegar, como el telescopio E-ELT, deberán ayudarnos para entender hasta donde llega este desafío, en forma de un tenue luz donde no debería haber ninguna.

Algunas de las galaxias masivas recién descubiertas se muestran en primer plano en estos pequeños subconjuntos del campo captado por UltraVISTA.

Allí donde nacen los monstruos.

El nacimiento de los monstruos

jueves, noviembre 19, 2015

Opportunity en el valle encantado

Observando las sombras del ocaso marciano.

Dejamos a Curiosity y regresamos por un momento a Opportunity, ahora ya instalado en las laderas de Marathon Valley, donde pasará el invierno que ya llama a sus puertas. Y el, a diferencia de su enorme compañero de aventuras marcianas, no puede prescindir del Sol para funcionar. Por ello toca armarse de paciencia y esperar tiempos mejores, cuando la aún lejana Primavera inunde de nuevo de luz las ahora alargadas sombras que ahora la rodean. Un momento de pausa, pero también para disfrutar de los cambios que se van produciendo a su alrededor, del lento paso del tiempo en un mundo que ingenios como el están haciendo cada día más cercano y más nuestro.

No son imágenes tan espectaculares como las de Curiosity, ya que sus cámaras están a años luz de tener las mismas capacidades, pero a pesar de ello, o precisamente por eso mismo, tiene un encanto especial. Y estas se tomaron entre las sombras, cuando Marathon Valley se encontraba sumergido entre las sombras, con un Sol demasiado bajo en el horizonte en ese momento. La magia de la exploración interplanetaria en esencia. No son necesarias demasiadas palabras. Ellas mismas transmiten, si uno de deja atrapar por ellas, lo que hace de la simple idea de alcanzar otros mundos, de ver lo que veríamos de estar nosotros mismos ahí, de lo que verán los exploradores del futuro que pisen por primera vez el planeta rojo, sea tan maravillosa.

Al menos para algunos de nosotros.

Las largas sombras proyectadas por Opportunity, iluminado por un Sol muy bajo en el horizonte. 

Index of /mars/opportunity/navcam/2015-11-17

miércoles, noviembre 18, 2015

Por las dunas del desierto marciano

Curiosity se prepara para ser el primer vehículo humano en pisar un campo de dunas extraterrestres.

Son una de las formaciones que más fácilmente relacionamos con los desiertos terrestres, aunque en realidad solo cubren una pequeña fracción de toda la superficie que puede catalogarse como tal. Enormes montañas de arenas, que le levantan como si fueran grandes olas marinas, que se desplazan lentamente siguiendo el ritmo de los vientos dominantes, y cuya forma, con una suave pendiente por un lado y una mucho más empinada en el otro, correspondiente al frente de avance, no dejan de recordárnosla. Pero no son exclusivas de la Tierra. Al menos conocemos otros dos mundos que las tienen con total seguridad, Titán y Marte

Y en este último estamos a punto se explorarlas por primera vez, ya que estamos hablando de dunas reales, con un rostro a favor del viento empinado para la arena se deslice hacia abajo, no las simples ondas de arena o polvo trasladado por el viento, y que por ejemplo Opportunity ya se encontró en su momento, con resultados casi fatales.

Conocidas como "Bagnold", este campo de dunas se extiende a los pies de Aeolis Mons y su oscura silueta es claramente visible en cualquier imágen que la Mars Recconaissace Orbiter, en su objetivo de ayudar a planificar la ruta de Curiosity, pueda tomar del interior del cráter Gale. Como un muro parece separar al gran rover de su gran objetivo, y encontrar un camino seguro a través de ellas y hacia el interior de la montaña una de las razones de que haya sido necesario hacer un largo viaje desde el punto de aterrizaje. Pero a su vez son un objeto de estudio lo suficientemente interesante como para intentar explorar Bagnold de forma directa. Y eso es lo que Curiosity esta listo para afrontar. "Hemos planeado investigaciones que no sólo nos hablan de moderna actividad de dunas en Marte, sino también nos ayudarán a interpretar la composición de las capas de arenisca hechos de dunas que se convirtieron en roca hace mucho tiempo", explica Bethany Ehlmann, del Instituto de Tecnología de California y el Jet Propulsion Laboratory.

Y su primer objetivo no puede ser mayor: Una duna con la altura de un edificio de 2 planetas y el tamaño de un campo de fútbol. Cuando la alcance tomará muestras para que sean analizadas por sus 2 laboratorios internos, mientras que se utilizarán las ruedas para abrir un surco en ella y comparar su aspecto exterior con el que esconde por debajo de la superficie. Pero la exploración ya empezó hace días, con Curiosity monitorizando diariamente la dirección e intensidad del viento y tomando imágenes de su objetivo, para captar así cualquier cambio que se produzca. Estamos hablando de dunas activas, que se desplazan lentamente con el tiempo, y por ello detectar pequeños cambios así como la climatología de cada momento, que permita relacionar ambos elementos, resultará igualmente valioso para entenderlas.

"Vamos a utilizar Curiosity para saber si el viento en realidad clasifica los minerales en las dunas por la forma en que el viento transporta las partículas de diferente tamaño de grano" explica Ehlmann."Estas dunas tienen una textura diferente de las de la Tierra", señala  Bridges, del Johns Hopkins University's Applied Physics Laboratory."Las ondas en ellas son mucho más grandes que las ondas en la parte superior de las dunas terrestres, y no sabemos por qué. Tenemos modelos basados en una presión de aire inferior. Se necesita una velocidad del viento superior para obtener una partícula que se mueve. Pero ahora vamos a tener la primera oportunidad de hacer observaciones detalladas".

Una nueva y emocionante etapa se abre ante Curiosity, dispuesto a un nuevo desafío antes de afrontar su meta final, la gran montaña de Aeolis Mons.

Una panorámica, aplicando en ella condiciones de luz como las terrestres para facilitar el trabajo de los geólogos, de parte de oscuros campos de dunas de Bagnold.

Duna 1, primera que estudiará Curiosity, excavando en su empinada ladera para sacar muestras y analizarlas.

Las observación continua por parte de la Mars Reconnaissance Orbiter permite apreciar que estamos antes campos de dunas "vivos", que como los terrestres se desplazan con el tiempo.

La ruta de Curiosity desde de aterrizaje. Se observa claramente el muro de dunas que separa este primero de Aeolis Mons. Para superarlo por un lugar más transitable, el rover se está desplazando paralelamente a el para alcanzar el lugar previsto para el cruce.

Ralph Bagnold, militar e ingeniero británico que fue pionero en el estudio de los activos campos de dunas del Sahara. El campo de dunas marcianas de Gale recibió su nombre.

NASA's Curiosity Mars Rover Heads Toward Active Dunes